Milei dio el batacazo. Sorprendió a politólogos y analistas, que le daban entre 17 y 22% de los votos. Obtuvo el 30, pero en algún momento del conteo estuvo arriba del 33. Ni él mismo parecía creerlo cuando esa noche agradeció a sus “hijos de 4 patas”, sus perros.