

Después de sufrir una fuerte derrota en la Cámara alta, donde se rechazó los pliegos impulsados por el presidente Javier Milei para integrar a Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla la Corte Suprema, el oficialismo reorganiza su estrategia legislativa. Con dos iniciativas que prometen reavivar la disputa con sectores de la oposición más férrea, La Libertad Avanza busca recuperar el protagonismo parlamentario.
Las cartas elegidas por el oficialismo para volver al centro del escenario político son dos proyectos que generan alto voltaje: uno propone la inhabilitación de candidatos con condenas por corrupción en segunda instancia (Ficha Limpia) y el otro plantea reducir la edad mínima para imputar penalmente a menores.
El silencio se produjo tras la votación que frustró la llegada de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla a la Corte Suprema, un revés inesperado para el Ejecutivo. Como reacción, el presidente Javier Milei acusó a Unión por la Patria y al PRO de haber cerrado un acuerdo para bloquear también la Ficha Limpia, lo que tensó aún más el clima político.
A modo de respuesta, el Gobierno apuró la convocatoria a una nueva sesión y un plenario de comisiones con temas candentes, buscando reinsertarse en la agenda mediática y obligar al peronismo a definirse en público sobre cuestiones sensibles.
Ficha Limpia: una jugada directa al corazón del kirchnerismo
La primera ofensiva será insistir con el tratamiento de la ley de Ficha Limpia, que establece que ninguna persona con condena firme en segunda instancia por delitos de corrupción podrá postularse a cargos públicos. La iniciativa, ya con dictamen favorable, será incluida en la sesión del miércoles 9 de abril a las 11 de la mañana.
Si bien la moción de preferencia fue rechazada en la última sesión, el oficialismo no abandonó su objetivo de aprobar esta norma. La convocatoria fue formalizada por Bartolomé Abdala, presidente provisional del Senado, con la intención de acelerar su sanción. Si la ley se aprueba, dejaría fuera del tablero electoral a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Para convertirse en ley, el proyecto necesita una mayoría absoluta (al menos 37 votos), ya que implica modificar las normas electorales. La vicepresidenta Victoria Villarruel no tiene posibilidad de intervenir en un eventual empate, por lo que La Libertad Avanza deberá acordar con sectores dialoguistas o parte de la oposición, ya que Unión por la Patria cuenta con 33 senadores.
Menores imputables desde los 13: el otro frente que abre el oficialismo
La segunda ley del Gobierno se concentrará en modificar el régimen penal juvenil, con el objetivo de bajar la edad de imputabilidad de 16 a 13 años. Para avanzar con esta reforma, se convocó a un plenario de cuatro comisiones clave que sesionará el miércoles a las 17.30: Legislación Penal, Familias, Niñez y Juventudes, Justicia, y Presupuesto y Hacienda.
Se pondrá a debate el texto enviado por el Ejecutivo en 2024, que propone un nuevo sistema penal para jóvenes de entre 13 y 18 años, incluyendo penas adaptadas a la edad y medidas alternativas como la prohibición de acercarse a la víctima, de vehículos conducir de salir del país o la obligación de realizar tareas comunitarias. La propuesta excluye las condenas perpetuas y establece un tope máximo de 20 años de prisión.
El tema vuelve a escena en medio del impacto social por el crimen de Kim Gómez, ocurrido en La Plata, y luego del reclamo que el propio Milei hizo en su discurso ante la Asamblea Legislativa. Actualmente, hay al menos 14 proyectos similares en discusión, entre ellos uno del legislador mendocino Álvaro Martínez que propone bajar la edad a 12 años. La estrategia del oficialismo será alcanzar un dictamen de consenso con bloques moderados.