¿Cuál es el método, la fórmula, el experimento o el laboratorio que le permite a Godoy Cruz mantenerse en la primera posición sin que pareciera pesarle la responsabilidad?
Nada tiene de extraño, por más que proliferen ensayos interpretativos que, pareciera, combinan una argamasa de frases hechas con cierta dosis de autosuficiencia de parte de quien o quienes presumen hallarle explicación a absolutamente todo.
Este equipo juega sin misterios, porque - precisamente - se autogenera credibilidad en sí mismo con argumentos sólidos y de los cuales se convence a sí mismo.
La formación que conduce Daniel Oldrá se construye desde una línea que parte desde el arco y que se va retroalimentando de sus marcadores centrales, del volante central y de quienes se desdoblan en la función defensa/ataque, tanto desde los laterales como desde el centro. Además, el rol de delantero central puede ser ocupado indistintamente por quien ataque la posición o vaya llegando desde atrás atento a la segunda jugada.
Es fútbol en el sentido pleno y genuino del término.
Y, si psicológicamente se fue recuperando de a poco tras el golpe frente a Colo Colo, lo que se percibe a corto/mediano plazo es que no existe el conformismo en concretar una buena temporada, sino que la experiencia acumulada en las últimas temporadas permite pensar que se está frente a una posibilidad de dar un salto de calidad histórico.
De este plantel depende. Tanto de quienes salen al campo de juego como de quienes sostienen el proyecto como cuerpo técnico.
La llave se acerca a la cerradura.
La puerta está lista para ser abierta.