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Oro: “quo vadis”

Quo vadis es un término latino que significa literalmente "¿A dónde vas?"; y su mayor significado es "¿Con qué propósito?" o "¿Con qué finalidad estás haciendo esto?".

24/08/2024 22:41
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Por Roberto Suárez, Especial para Jornada

Poco se sabe del destino de las reservas de oro que nuestro país tenía en su Banco Central, luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, confirmará su envío a un destino incierto con el supuesto objetivo de mejorar la rentabilidad de esas tenencias. Pero no dio mayores detalles, tampoco lo hizo el Banco Central y no hay, hasta el momento, información oficial al respecto, lo que genera sospechas y especulaciones, así como temores por posibles embargos ante las causas judiciales iniciadas por acreedores externos en gobiernos anteriores.

En el “Estado Resumido de Activos y Pasivos”, al 23 de julio de 2024 el Banco Central informó que tenía reservas de oro (“neto de previsiones”) equivalente a unos US$ 4.771 millones al tipo de cambio oficial de esa fecha. Previamente, en un reporte sobre reservas internacionales fechado el 31 de marzo de 2024, la entidad monetaria consignaba reservas en oro por US$ 4.344 millones, que en volumen representan 1,98 millones de oro fino en onzas troy, equivalente a poco más de 61 toneladas.

Se ha especulado con que los lingotes se utilizarían para viabilizar una operación de venta de un activo a una entidad financiera con el compromiso de ésta de revendérselo al dueño original y a un precio determinado. Es una forma de préstamo pero con la cesión temporal del activo en garantía, en este caso, el oro de las reservas. El problema es que si en la fecha determinada el país no está en condiciones de pagar la recompra del oro, la entidad financiera podría quedárselo. De ser así, la operación de salida de los lingotes se habría hecho en medio de un fuerte secretismo.

La preocupante salida del Oro de los argentinos la descubrió un mendocino, el secretario general de la Asociación Bancaria, el diputado nacional Sergio Palazzo, quien ha solicitado el acceso a tal información y tras serle denegada la solicitud esta semana, han crecido los temores de un envío sin rescate de las reservas en oro. “Están queriendo ocultar lo que están haciendo con el oro afuera”, expresó  Palazzo en una entrevista televisiva.

El dirigente, recordó que anteriormente se habían detectado cuatro cargamentos de oro, los dos primeros en junio. “Me explicaban que se hacen tantos envíos por un problema de los seguros en el transporte aéreo, que estaría limitado a una suma tope de 300 millones de dólares en cada vuelo. Por lo cual, si se comprueba que en los últimos días hubo un quinto cargamento, estaríamos ya en el orden de los 1.500 millones de dólares transportados al exterior”. Se trata de “una tercera parte del total de reservas internacionales en oro del Banco Central”, explicó.

La Asociación Bancaria, ha advertido del envío al exterior de reservas en lingotes cuyo valor alcanzaría los 1.500 millones de dólares (unos 1.350 millones de euros). Es incierto el destino del oro y si está suficientemente protegido de un eventual embargo de terceros.

El Banco Central se ha negado a brindar información sobre este patrimonio público. Argumenta que “cualquier dato vinculado a la ubicación estratégica” de dichos valores “podrá poner en peligro la seguridad de estos activos”.

Sin embargo, el ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó que se había enviado al extranjero oro de las reservas del Banco Central, sin detallar cuánto ni adónde. Caputo calificó este movimiento como “muy positivo”. “Hoy tenés oro en el Banco Central que es como si tuvieras un inmueble adentro, que no lo podés usar para nada. En cambio, si vos tenés eso afuera, le podés sacar un retorno”, dijo el “Messi” del gabinete de Javier Milei.

 Palazzo explicó a través de la red social X que el Banco Central se negó a responder a sus tres solicitudes de acceso a la información pública sobre las operaciones hechas con el oro de las reservas. “Hay un error en la respuesta, aducen razones de seguridad para las reservas por las cuales no se puede informar de su ubicación geográfica; y que dar la información podría poner en peligro al sistema bancario. Es ridículo”, sostuvo Palazzo. 

“Además, pedí que me informen en qué reunión de Directorio se tomó la resolución, qué intervención tuvieron los organismos de control, qué medios de transporte se utilizaron y qué seguros se contrataron para garantizar el activo trasladado y con qué fin se hizo la remisión del oro. Podrían haber eludido la ubicación geográfica y darme el resto de la información. Si no dan las respuestas es porque las están ocultando o porque no tienen cómo explicarlo”, afirma nuestro comprovinciano.

 Esto es muy grave porque una cuestión relevante es el riesgo de embargos por demandas existentes o que se produzcan, ya sea por reclamos de deuda o por la estatalización de [la petrolera] YPF. Por dar un dato relevante: el valor accionario de YPF es de 13.000 millones de dólares y el fondo buitre Burford Capital reclama a Argentina 16.000 millones en el juicio que se lleva adelante en el distrito sur de Manhattan.

Si la operación implica que el Banco Central se desprende del oro, esto iría a contramano de lo que hace el mundo, especialmente diversos países de Asia, como India y China, que están incrementando sus posesiones de oro. Es necesario que el Gobierno aclare los motivos del traslado de oro y evite negociaciones que impliquen riesgos financieros y legales Si el transporte del oro tiene ese propósito, la apuesta del Gobierno consistiría en intentar transmitirles tranquilidad a los mercados financieros y buscar desde ahora una baja del riesgo país, que hoy le impide tomar crédito. La contracara de recurrir al oro es que sugiere que Argentina no cuenta con activos líquidos y se ve obligada a apelar a su tesoro más preciado.También sin dar precisiones, más tarde Milei dio a entender que el traslado del oro se relacionaría con la posibilidad de utilizarlo como garantía para tomar un préstamo puente, conocido como Repo (por su nombre en inglés, repurchase agreement).

Si el transporte del oro tiene ese propósito, la apuesta del Gobierno consistiría en intentar transmitirles tranquilidad a los mercados financieros y buscar desde ahora una baja del riesgo país, que hoy le impide tomar crédito. La contracara de recurrir al oro es que sugiere que Argentina no cuenta con activos líquidos y se ve obligada a apelar a su tesoro más preciado.

Pero un repo, que menciona Milei, es como empeñar las joyas de la abuela. Das el oro a cambio de dólares. Luego toca devolver los dólares para recuperar el oro. Si no tenés los dólares, la casa de empeño (en este caso, un banco internacional) se queda con el oro.

 

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