Por Luis Martínez, Redacción Jornada
Desalmadas tormentas, una economía que poco ayuda, eternas discusiones para fijar el precio de la uva más allá del mercado y con plazos que en este marco económico suelen terminar siendo más un castigo que un negocio, los viñateros afrontan otra temporada de cosecha.
Intentamos conocer un poco más el momento, el día a día, que los productores atraviesan por éstas épocas tan convulsionadas desde lo económico y por eso en “Juntos de mañana”, el matinal de radio Jornada (FM 91.9) hablamos con Eduardo Córdoba, presidente de la Asociación de Viñateros de Mendoza.
Como ex funcionario y ex legislador provincial (fue senador desde 1991 a 1995) Eduardo sobre la cosecha nos dice “viene con merma, mayor que la que se pensaba y ha sido muy difícil conseguir gente. Viene complicada la cosecha, pero el viñatero ya está acostumbrado a esta lucha y de a poco va saliendo la uva. Lo que sí estamos insistiendo en que nos paguen lo que nos corresponde porque es oferta y demanda si hay disminución tiene que darse una compensación en el precio”.
Sobre la negociación en “este año hay más interés de las bodegas. Nosotros estamos pidiendo y lo están cumpliendo muchas bodegas 25 pesos para las uvas mezclas, 45 a 48 para la Bonarda, y de 70 para arriba en el Chardonay y el Malbec y según la zona, los Malbec de la primera zona tienen mejor valor todavía. Así que esperemos que se cumpla. Están cancelando en cuatro pagos mensuales o en seis quincenas tampoco tan lejos en los tiempos porque hay una inflación del 50%”, señaló.
Aprovechando su experiencia de haber estado en los dos lados del mostrador como funcionario y legislador en su momento y como productor en la actualidad le preguntamos cómo se da la vinculación por un lado con privados, las bodegas, y , por el otro, con el Estado en cuanto a asistencia, capacitación y sostuvo “el gobierno provincial en relación a los daños por granizo ha actuado con prontitud a igual que la recepción de denuncias y hay algunas líneas de financiamiento a tasas subsidiadas para algunas inversiones. Ahora se va a poner en marcha el Proviar II (Programa de Apoyo a Pequeños Productores Vitivinícolas en Argentina) que es una asistencia financiera importante con tasas financiadas. Lo que sí es importante cuando el Poder Ejecutivo Provincial se sienta en la mesa de negociación y de alguna manera lauda entre el productor y el bodeguero”.
Los viñateros que se devoró la realidad
Intentamos sumergirnos en la realidad del sector, husmear un poco más allá de la mirada singular de cada día saber en verdad que pasa con la actividad y nos sorprendimos con los datos sobre la cantidad de productores que han salido del circuito para dedicarse a otra cosa.
“Lo que sí tienen que entender (en referencia a los bodegueros) que si siguen con precios tan bajos van a seguir desapareciendo viñateros. Hoy hay 3.000 menos que los que había ocho años atrás. La superficie cultivada paradójicamente es mayor porque las grandes empresas al ver que se le caen productores hacen sus plantaciones y plantan de 50 a 100 hectáreas de un saque”.
Otro gran tema de discusión en temporada de cosecha es el precio del tacho de uva. Sobre el tema señaló “es variable de acuerdo a la cantidad de uva, la variedad, el lugar, la zona más o menos se paga entre 60 y 80 pesos hay quien ha pagado hasta 100 pesos por la variedad como el Malbec que es un racimo más chiquito que produce menos por hectárea y le cuesta más al cosechador, eso se va pactando en cada lugar”, puntualizó
El riego en época de emergencia hídrica, otro gran tema
La provincia atraviesa otro año de emergencia hídrica, ya pasamos la década en esta situación, y u no de los grandes temas es cómo regar sin perder tanta agua. La provincia divide el uso del agua en un porcentaje para consumo y el otro destinado a mantener la producción a través del riego.
Una de las recomendaciones a los productores es no regar más a manto como tradicionalmente por años se hizo en las propiedades incorporando en la medida de lo posible el riego por goteo.
Acerca de esta situación indicó “realmente hay dos cosas que hacer por un lado los viñateros tenemos que regar con más eficiencia intra finca pero también Irrigación tiene que hacer una fuerte inversión en impermeabilización de canales porque en los canales se pierde el 50% del agua que se transporta. Se ha impermeabilizado una parte pero es el 10% de la red de canales primarios, secundarios y terciarios. Es decir, ahí hay un fuerte esfuerzo que hay que hacer, una inversión pública para que pierda menos agua, esa es la realidad. Con el riego por goteo no hay que deslumbrarse porque al productor le implica el uso de la energía que es cara y con un costo de mantenimiento difícil de realizar. Y, por otro lado, si hay un cultivo ya implantado las raíces está expandidas a todo lo ancho del camellón si pones riego por goteo se arma como un globo de agua y el resto de las raíces no recibe y por lo tanto hay una caída en la productividad eso hay que verlo con pinzas, caso por caso.”, señaló.
Como pueden apreciar detrás de la enorme fiesta que nos deslumbra a propios y extraños, hay un puñado de productores que son el origen de todo. Allí nacen los racimos que después se transformarán en el vino nuevo de cada año. Productores que por ser precisamente el principio de todo deberían recibir un poco más de atención.