Mientras los jefes de Pro se desencuentran en la disputa por las candidaturas de 2023, los líderes de la UCR buscaron hacer una demostración de fuerza a sus socios de Juntos por el Cambio y desafiaron a Mauricio Macri durante un acto multitudinario en Costa Salguero, en el que le rindieron homenaje a Raúl Alfonsín, al cumplirse un nuevo aniversario de su triunfo electoral de 1983, que marcó el regreso de la democracia al país.
Del acto participaron las principales figuras del centenario partido: desde Gerardo Morales y Martín Lousteau, quien se mueven en tándem en el ecosistema de la UCR y buscan contener el avance de Mauricio Macri en el tablero opositor, hasta Alfredo Cornejo, Maximiliano Abad, Gustavo Posse y Mario Negri o Luis Naidenoff, entre otros. También fueron invitados los presidentes de Pro y la CC, entre otros aliados en JxC. Por su parte el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, pasó “a saludar”.
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La reunión cumbre comenzó con encendidos discursos de Mariela Coletta, titular de la UCR porteña, Negri, Naidenoff y Cornejo. En esas alocuciones, los referentes radicales destacaron el legado de Alfonsín y llamaron a la unidad de JxC. También pidieron hacer una revisión de los errores de la gestión de Cambiemos. A su turno, Abad advirtió que el radicalismo tiene vocación de poder y quiere gobernar al país en 2023.
En tanto, Lousteau apuntó sus dichos contra Mauricio Macri, Bullrich y el ala dura de Pro. Sin mencionar al expresidente, aseguró que la Argentina no saldrá de las crisis recurrentes con “un shock” económico que sea “una guadaña”. Dijo que el legado de la gestión de Cambiemos es haber terminado con “doce años de populismo” y haber dejado una coalición con chances de volver al poder. Pero pidió que el espacio “aprenda de sus errores”, para ser “fuerte y grande”.
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Luego, Lousteau destacó su alianza estratégica con Larreta en la Ciudad: resaltó que el acuerdo de 2019 permitió un triunfo histórico en las urnas y avanzar con reformas, como el estatuto docente, en el terruño porteño. Al final de su discurso, reivindicó el diálogo en la política y pidió terminar con las “divisiones”.
Al final del acto, Morales copó el escenario con duras críticas a Macri. “Liderar no es creer que tenemos el mejor equipo de los últimos 50 años para después fracasar”, lanzó. Y advirtió que nadie “va a correr” al radicalismo.
También respondió a los dichos de Macri sobre el “populismo light” que parecieron apuntar hacia el radicalismo. “No acepto la descalificación de quienes nos dicen populistas. Y creen que somos unos atrasados porque nos abrazamos a los ideales de nuestro partido que siguen aún vigentes. Que son los que nos devolvieron la democracia”.
La presencia de minutos de Larreta
Tras regresar de Formosa, Larreta llegó a Costa Salguero, saludó a los jefes radicales y se retiró del complejo. No se quedó a escuchar los discursos.
Por otra parte, a la reunión cumbre del radicalismo también fue Maximiliano Ferraro (CC) -Elisa Carrió se excusó por el calor–. En tanto, Patricia Bullrich no pudo asistir porque viajó a Uruguay, pero difundió una carta en la que celebró la convocatoria. En su lugar, está Gerardo Milman, su jefe de campaña y mano derecha, salpicado por la causa judicial por el atentado contra Cristina Kirchner.
En el encuentro radical también estuvieron Emilio Monzó y Rogelio Frigerio, referentes del ala moderada de JxC, y Margarita Stolbizer, líder de GEN, quien cuestionada por sus socios tras su ausencia en la votación en particular del presupuesto-.
Manes y Valdés, los ausentes de la jornada
Quien no participaron es el médico Facundo Manes, rival de Morales en la interna por la candidatura presidencial, a quien hasta hace poco la cúpula radical exhibía como la gran esperanza con miras a 2023.
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Pero no fue el único ausente de peso: Gustavo Valdés, gobernador de Corrientes y uno de los impulsores de la renovación radical, llegó ayer de España y se fue a su provincia. Molesto con Morales por la organización unilateral del evento y la sospecha de que intentará usar el acto para lanzar su candidatura presidencial para presionar al Pro para negociar lugares. Por el lado de la provincia, Julio Cobos tampoco se presentó por un tema familiar. En cambio, Valdés, quien cenó hace dos semanas con Mauricio Macri, prefirió no mostrarse.