El Gobierno busca trabajar como un interbloque con la Unión Cívica Radical (UCR) tras la ruptura de los diputados que responden a Facundo Manes. El Ejecutivo quiere profundizar el vínculo con el jefe de bloque Rodrigo de Loredo y los legisladores Mariano Campero, Luis Picat, José Federico Tournier, Martín Arjol y Pablo Cervi, que acompañaron las últimas medidas del oficialismo en el Congreso.
La Casa Rosada mantuvo hasta ayer la postura de ofrecerles sumarse al bloque oficialista a los radicales aliados ante la posibilidad de que fueran desplazados de la UCR.
La mesa chica de Balcarce 50 asegura además que planea ampliar los acuerdos legislativos con los bloques aliados hacia el armado de listas para las elecciones legislativas de 2025. Sostienen que compensarán a los dirigentes que se alineen con “todo lo que proponga el Presidente”.
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La Casa Rosada busca aumentar las bancas de La Libertad Avanza en la Cámara de Diputados y mantiene la postura de “sumar mayor coordinación” en la presentación de proyectos. Es por eso que convocó a la mesa legislativa de este miércoles al PRO y a la UCR.
El asesor presidencial Santiago Caputo y el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán, recibieron a los presidentes de bancadas Cristian Ritondo (PRO) y Rodrigo de Loredo (UCR) junto a los diputados Silvina Giudici, Soledad Carrizo, Luis Picat y Lisandro Nieri.
Participaron también el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger; el presidente de la Cámara Baja, Martín Menem; y los legisladores de La Libertad Avanza, Nicolás Mayoraz, Nadia Márquez, Santiago Santurio, Carlos Zapata, Manuel Quintar y Gabriel Bornoroni.
La presencia de los radicales reflotó la tensión dentro del bloque de la UCR y aceleró la ruptura en el espacio. Elevó el enfrentamiento entre el sector que responde al diputado Facundo Manes y el que lidera de Loredo tras la corta tregua que acordaron este martes. “Se confirma la ruptura porque estaban conversando y de Loredo no fue a la reunión para irse a la Rosada. Y ahí todos explotaron”, confió a TN un alfil de Lousteau, uno de los referentes de la docena de legisladores, que decidieron este miércoles irse del bloque.
De esta manera, de los 33 legisladores que tiene hasta ahora la UCR en Diputados, quedarán 2 bancadas, una de 12 referenciada en Lousteau y Manes; y los 21 que quedarían bajo la presidencia de Rodrigo de Loredo. De momento, los radicales libertarios no se irían. “Hay espacio para el que quiera acompañar, siempre lo decimos. La idea es ampliar al bloque e integrar a todos los que quieran”, expresó a TN un funcionario.
Es por eso que el Gobierno busca profundizar el diálogo con gobernadores aliados. Milei se reunió el lunes con los mandatarios Raúl Jalil (Catamarca), Hugo Passalacqua (Misiones), Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Gustavo Sáenz (Salta) en la quinta de Olivos.
El jefe de Estado tiene en agenda este jueves un almuerzo con Claudio Poggi (San Luis), Marcelo Orrego (San Juan), Jorge Macri (CABA), Rogelio Frigerio (Entre Ríos) e Ignacio Torres (Chubut) en la Casa Rosada. Servirán empanadas.
La Casa Rosada sostiene que quiere “romper el centro político” y busca que se formen dos coaliciones polarizadas. Aseguran que apuntan a confrontar con Cristina Kirchner para atomizar la discusión política y quieren elevar la disputa con el peronismo en la provincia de Buenos Aires.
La mesa chica de Balcarce 50 quiere cerrar un acuerdo con el PRO para competir contra la oposición en el territorio bonaerense, pero pone en duda la alianza para la Ciudad de Buenos Aires. “Si Macri juega, Patricia va a querer competir. Es un escenario complicado”, dijo un funcionario.