El riesgo país, indicador clave de la confianza internacional en la economía local, cayó este lunes a 571 puntos básicos, el nivel más bajo en más de siete años, según datos de JP Morgan. Este descenso, que lo ubica por debajo de los 600 puntos por primera vez desde agosto de 2018, refleja el renovado interés de los inversores y la fortaleza de los bonos soberanos.
El cambio de tendencia se sustenta en señales concretas: solvencia fiscal, estabilidad inflacionaria, y el respaldo de las reservas internacionales del Banco Central (BCRA), reforzadas recientemente con un acuerdo de REPO por USD 1.000 millones. A esto se suma la expectativa de un nuevo acuerdo con el FMI y la continuidad de una política fiscal rigurosa bajo la administración de Javier Milei.
Un mercado que responde a la confianza
Los bonos Globales y Bonares alcanzaron valores promedio de USD 73, su cotización más alta desde que comenzaron a circular, consolidando una correlación directa con la caída del riesgo país. La liquidez del Tesoro, que ya cuenta con USD 5.698 millones en reservas para afrontar vencimientos clave en enero y julio, ha sido determinante.
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Auge de las reservas y consolidación de políticas
Las reservas internacionales del BCRA crecieron en USD 1.250 millones la semana pasada, alcanzando los USD 32.774 millones. Este nivel, cercano al récord de la administración Milei, es resultado de compras oficiales en el mercado mayorista y del ingreso del REPO firmado con bancos internacionales.
El Banco Central destacó la importancia de esta estabilidad para enfrentar presiones externas y apuntalar la recuperación económica. Las operaciones bursátiles en Argentina han iniciado 2025 con firmeza, evitando caídas por toma de ganancias y manteniéndose al margen de las fluctuaciones globales.
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Un futuro de cautela optimista
Pese al optimismo, algunos analistas destacan los desafíos que aún enfrenta el país. Según un informe de la consultora Suramericana Visión, “Argentina tiene capacidad para cumplir con sus vencimientos en 2025 incluso sin acceso a mercados internacionales, pero el panorama cambiaría si la actividad económica no logra sostenerse".
El informe subraya que este año el país enfrentará compromisos de casi USD 25.000 millones entre deudas públicas y privadas. Sin embargo, el equilibrio fiscal y la recuperación de la actividad económica serán claves para mantener la confianza inversora.