No hay nada más delicioso que regalarte un momento de relajación luego de un día difícil, y mejor aún si es con un baño de Afrodita. ¿Has escuchado sobre él? Este ritual fue creado en memoria de la diosa de la belleza, el amor y el encanto, o sea Afrodita, quien de acuerdo con la mitología griega, solía bañarse en una piscina natural de la cual emanaba un poderoso encanto, pues esa agua ayudaba a conservar la belleza eterna al sumergirse en ella.
Actualmente, cualquiera puede replicar el agua de la piscina de la diosa del amor con ingredientes accesibles y fáciles de encontrar, siempre y cuando sigas este ritual que manifiesta y atrae la belleza al máximo. ¿Quieres saber cómo se hace? ¡Sigue leyendo!
Cómo hacer un baño de Afrodita
Al intencionar el agua y regalarte un momento de self-love, esta práctica elevará tu autoestima y seguridad de formas inimaginables, haciéndote sentir como toda una diosa del Olimpo. Aquí lo que necesitas para llevarlo a cabo:
Ingredientes
½ taza de leche
2 cucharadas de miel
1 cucharadita de canela en polvo
½ taza de té de manzanilla
3 rocíos de tu perfume favorito
Paso a paso
Mezcla todos los ingredientes en un frasco de vidrio hasta que cada uno quede bien disuelto y procede a intencionar la mezcla. Para ello, tendrás que cerrar los ojos, poner el recipiente en tus manos y respirar profundamente.
Luego, agradece por lo que tienes, visualiza cómo te quieres sentir después del baño (puede ser más relajada, más hermosa) y repite en voz alta: ‘intenciono este baño para…’. Una vez listo, da las gracias, abre los ojos y haz lo siguiente:
Si tienes tina: vierte el líquido con agua tibia, deja reposar por 5 minutos y entra a relajarte como de costumbre.
Si tienes regadera: después de ducharte, rocía el baño de Afrodita intencionado en todo tu cuerpo, espera 20 minutos y haz un último enjuague con agua tibia.
La recomendación es hacer este ritual los días viernes, ya que se relaciona con el planeta Venus y eso potencia su eficacia. ¿Quieres probar su magia? ¡Nosotras sí!
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