En una decisión clave para el desarrollo del sector científico y tecnológico, los laboratorios argentinos tendrán la posibilidad de importar muestras sin valor comercial a través de envíos internacionales por courier. Esta flexibilización, establecida por la Resolución 5608/24 de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), permitirá al sector reducir costos, agilizar procesos y competir en el mercado global con servicios de investigación y desarrollo.
La medida beneficia tanto a laboratorios públicos como privados inscriptos en el Registro Nacional de Certificadoras y Laboratorios de Ensayo y Calibración (RENACLAB), habilitándolos a importar muestras de ensayo de hasta 50 kg por envío. Entre estas muestras se incluyen productos alimenticios, como aceite de oliva y miel, y materiales de referencia esenciales para garantizar la calidad y el reconocimiento internacional de los análisis.
El fin de las barreras burocráticas
Hasta ahora, los laboratorios enfrentaban múltiples trabas administrativas que encarecían los costos logísticos y retrasaban la llegada de muestras fundamentales para su trabajo. La imposibilidad de usar servicios de courier obligaba a recurrir a métodos más lentos y complejos, afectando la competitividad del sector.
La nueva normativa no solo simplifica estos procesos, sino que también eleva los límites para importaciones. Los laboratorios podrán traer mercaderías de hasta 3.000 dólares por envío y hasta 10.000 dólares en el caso de muestras destinadas a certificaciones internacionales, impulsando su capacidad para responder a las demandas del mercado global.
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Una puerta abierta a la exportación de servicios
La posibilidad de importar con facilidad supone un incentivo para que los laboratorios argentinos expandan su oferta al exterior. Según la Cámara Argentina de Laboratorios Independientes Bromatológicos, Ambientales y Afines (CALIBA), actualmente solo el 5% de la capacidad de los laboratorios privados se destina a la exportación, generando ingresos por 1,7 millones de dólares. Sin embargo, con esta medida, se proyecta que esa cifra podría crecer a 10 millones de dólares anuales para 2025.
Además, los laboratorios argentinos estarán mejor posicionados para ofrecer servicios de certificación de calidad en mercados internacionales, especialmente en países de la región. Este cambio es particularmente relevante en un contexto donde los estándares de calidad y la capacidad de respuesta son factores determinantes para ganar contratos y generar confianza en los clientes.
Innovación y desarrollo al alcance
La nueva reglamentación también impulsa la mejora continua de los laboratorios, facilitando la importación de materiales de referencia que son clave para perfeccionar sus procesos. Esto no solo aumenta la precisión de los ensayos, sino que eleva el prestigio del sector, abriendo nuevas oportunidades de colaboración con empresas extranjeras.
La Resolución 5608/24, elaborada en conjunto con la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía, representa un paso estratégico hacia la consolidación de los laboratorios argentinos como actores destacados en la industria de ensayos y certificaciones.
Con esta flexibilización, la ciencia y la tecnología argentinas ganan un impulso necesario para competir a nivel global, llevando innovación, calidad y servicios de alto valor agregado más allá de sus fronteras.