Cristina Fernández de Kirchner recibió a la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel para coordinar la organización de la Asamblea Legislativa del 10 de diciembre en la que asumirá Javier Milei.
Villarruel destacó que el encuentro fue "una reunión cordial y amable". En ese mismo tono confirmó que acordaron llevar adelante "una transición que sea en beneficio del pueblo argentino". Luego precisó que será "ordenada".
Uno de los grandes temas de discusión y polémica es quien ocupará la presidencia provisional del cuerpo. Al ser consultada Villarruel dio la primera señal de un posible foco de conflicto al advertir que esa será "una prerrogativa que tiene el presidente Milei".
Esto se diferencia de lo sostenido desde el interior del kirchnerismo que viene deslizando su intención de quedarse con la presidencia provisional, ya que a partir de la renovación de la Cámara contará con la mayoría (35 bancas) y está muy cerca de asegurarse el quórum propio.
Tras la victoria de los libertarios en las PASO, desde la bancada que preside José Mayans hubo opiniones en contra de otorgarle la presidencia provisional del Senado a los libertarios. El triunfo de Sergio Massa en la general del 22 de octubre les permitió recuperar la respiración, pero la aplastante elección de Milei en el balotaje volvió a desorientar al kirchnerismo que ahora busca refugiarse en el Congreso donde tiene la primera mayoría en ambas cámaras.
En esta pulseada, La Libertad Avanza, que tendrá 7 senadores a partir del 10 de diciembre, no tiene otra chance que ampliar su acuerdo con Mauricio Macri, que le aportaría hasta el momento 5 senadores con aliados. También están los 3 senadores de Unidad Federal que podrían entrar en una alianza con Juan Schiaretti, cada vez más cerca de los libertarios.
Aun así, Milei necesitaría también del apoyo de los radicales y de los senadores larretistas que le aportarían 15 votos para llegar a los 37 votos que requiere el quórum. Por eso, Villarruel planteó a la salida del Senado que La Libertad Avanza va a "hablar con todos los espacios para sacar todas las leyes".
Desde la presidencia del Senado, Cristina Fernández de Kirchner hizo difundir un comunicado en el que destacó su gestión al señalar que al asumir la gestión "recibió la obra social del personal legislativo (DAS) con $390 millones de déficit mensual y que luego del proceso de saneamiento y mejoras en la gestión se logró un superávit equivalente a 5 meses de prestaciones".
El dato curioso de la reunión, que duró 1 hora y que se desarrolló en el despacho de la presidencia del Senado, fue la falta de una foto oficial del encuentro de ambas vice, lo que reflejó un poco las diferencias entre las protagonistas.