La Unidad Fiscal de Delitos Sexuales solicitó al tribunal de sentencia del juicio por el Caso Próvolo 2 que la monja Kumiko Kosaka sea condenada a 25 años de prisión por abusos sexuales. El fiscal Alejandro Iturbide también pidió que la religiosa sea inhabilitada durante 10 años para ocupar cargos educativos y de albergue que involucren a menores y requieran supervisión de la autoridad pública.
La fase de alegatos continuará el próximo lunes en el Polo Judicial, con la participación de los abogados representantes de las víctimas y sus familias. Se espera que el abogado Lucas Lecour solicite la condena de Kosaka a prisión e inhabilitación.
Kumiko Kosaka fue acusada el viernes de ser penalmente responsable de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante agravado en un hecho y corrupción de menores en cinco hechos. También se la considera partícipe necesaria en los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante agravado continuado y tres hechos de abuso sexual con acceso carnal agravados.
Después de los alegatos de la parte querellante, llegará el turno de la defensa de la monja, a cargo del abogado Carlos Varela Álvarez.
Una de las monjas acusadas en el Caso Próvolo 2
Kumiko Kosaka se encuentra entre las 9 mujeres acusadas en el juicio del Caso Próvolo 2 por abusos sexuales. Una vez finalizados los alegatos sobre su caso, se dará inicio a la segunda etapa del juicio. En esta fase, el fiscal, la parte querellante y los abogados defensores abordarán la situación de la otra religiosa implicada, Asunción Martínez, y de otras siete mujeres que ocupaban cargos directivos y desempeñaban diversas labores en el desaparecido Instituto Próvolo de Luján.
El juicio, que se lleva a cabo en el Polo Judicial, ha tenido una duración de dos años y las audiencias se han llevado a cabo a puertas cerradas debido a que los delitos investigados son de naturaleza privada, ya que han afectado la reputación de las víctimas.