José Valerio, ministro de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, en diálogo con Radio Jornada (91.9) opinó sobre la presencia del Poder Judicial en la reunión mantenida hace algunos días con el Ejecutivo, los municipios y la Iglesia Católica para resolver el problema de las personas en situación de calle.
El ministro señaló que si bien no es un ámbito en donde pueda intervenir directamente el Poder Judicial, ya que la mendicidad y la situación de calle no son delitos, van a apoyar y a participar en encontrar medidas al menos paliativas por la gravedad de la situación y la proximidad del invierno.
Valerio sí remarcó como importante una carencia que tiene la Justicia, que tiene que ver con que faltan lugares en donde cumplir las llamadas contravenciones, que son las faltas que comete la gente y por la cual le corresponden días de arresto, pero que no se cumplen en cárceles.
“La mendicidad no es un delito ni los jueces somos policías”
El magistrado destacó que la reunión para resolver la problemática de las personas en situación de calle la impulsó el sacerdote Marcelo De Benedectis, vocero del Arzobispado de Mendoza.
Si bien la justicia solo puede intervenir cuando existe una contravención o un delito, Valerio destacó que “lo que podemos hacer es advertir cuáles son las problemáticas”.
Para esto, dijo que es muy útil que exista un registro de las personas en situación de calle, tal y como se planteó en esta reunión, porque es una manera de identificar puntualmente la dimensión del problema.
Sobre este tema, explicó que la Justicia interviene si se comete una contravención, y estar en la calle porque no se tiene una vivienda, no lo es.
“La mendicidad no es un delito, es una problemática social profunda y arrestar a las personas que se encuentran en situación de calle no es una solución”, destacó.
Además, manifestó que el ámbito para resolver esta temática es el Ejecutivo, pero hay otros actores que intervienen –organizaciones de la Sociedad Civil y la Iglesia, en este caso- entonces es bueno coordinar acciones.
Faltan lugares para cumplir las contravenciones
Acerca de este punto, Valerio lo remarcó como una carencia del sistema, ya que las contravenciones no pueden cumplirse en unidades carcelarias.
Son tan variadas, que pueden tener que ver con una persona que altera el orden público, como un padre o madre que no envía a los hijos a la escuela.
“Hay una carencia en este sentido en la Justicia. Falta de lugares cuando hay que cumplir arresto por contravenciones. Por ejemplo, las personas que cometen una contravención en San Martín, tienen que venir a Mendoza, porque allí no hay ningún lugar para esto”, destacó Valerio.
Distancia entre el Poder Judicial y los ciudadanos
Al respecto de la distancia del Poder Judicial con los ciudadanos, Valerio manifestó que es una realidad, pero que se puede revertir. Esto sucede porque la sociedad en si misma se ha ido complejizando, sobre todo por el uso de la tecnología.
Puso énfasis en que a principios del siglo XX, el que resolvías situaciones cotidianas de la población con respecto a la Justicia era el juez de Paz. Estos jueces eran elegidos por la gente y tenían que poseer un conocimiento de las cuestiones de la vida diaria, algo que con el tiempo y la intervención de la tecnología se ha perdido.