El clima adverso en la Cordillera de los Andes ha generado un grave problema para los viajeros que intentaban cruzar la frontera entre Argentina y Chile. El Paso Internacional Cristo Redentor, uno de los más importantes entre los dos países, se cerró el domingo a las 6 de la mañana debido a las nevadas en alta montaña y el tránsito está completamente paralizado.
Según la coordinación del Paso Internacional, cerca de 7.000 personas chilenas se quedaron varadas en Mendoza, esperando que se reabra el tránsito. Muchos de ellos llegaron a la zona para aprovechar el fin de semana XL, pero ahora están con los bolsillos vacíos y sin saber cuándo podrán regresar a su país.
"Muchos se quedan acá a dormir", describió una empleada de la Terminal de Ómnibus de Mendoza. Los turistas intentan aprovechar el poco tiempo que tienen en la zona, pero muchos están preocupados por su situación y no saben cómo volver a Chile.
Además, muchos pasajeros perdieron sus vuelos debido al cierre del paso y ahora deben reprogramar sus itinerarios. Una pasajera que tenía que estar en Santiago para embarcar hacia México tuvo que reprogramar todo su viaje y finalmente tomará un vuelo desde Córdoba.
La situación es complicada para los viajeros, especialmente para aquellos que se dirigían a tierras chilenas y no tomaron las precauciones correspondientes. En la Terminal, no eran pocos los que confesaban haberse quedado sin dinero.
Las autoridades avizoran que el paso podría reabrirse el martes, pero eso dependerá del clima y las condiciones del tránsito. Hasta ese momento, los viajeros deben seguir esperando y adaptarse a la situación.