La ministra de Salud, Desarrollo Social y Deportes, Ana María Nadal, dio a conocer cómo se logró bajar la Tasa de Mortalidad Infantil (TMI), anuncio que realizó el Gobernador Rodolfo Suárez en el discurso del 1° de mayo frente a la Asamblea Legislativa.
En 2020, la tasa fue de 7,5 por mil niños nacidos vivos y el año pasado bajó a 6,9. En el caso del embarazo adolescente, se registró una baja de 8,3 en 2020 a 7,5 en el paso 2021.
Con estos datos tan favorables para Mendoza, la ministra Nadal dejó en claro que “en la Provincia hemos decidido priorizar en base a las líneas de cuidado, la protección integral de la salud de la mujer y las infancias” y aseguró: “También, hemos dado un salto de calidad al ser una de las primeras provincias del país en incorporar tecnología de punta que permite un testeo gratuito y rápido del virus papiloma humano, responsable del 99% de los cánceres de útero en mujeres ya que en salud todo tiene que ver con todo”.
“El sistema de salud y los equipos de Desarrollo Social de este ministerio han trabajado duro y de manera muy intensa en el territorio para contar con una baja en estos indicadores vitales que tienen mucho que ver con la vida de las personas”, dijo Nadal, y agregó: “La tasa de mortalidad infantil tiene una dimensión social importantísima para nuestra provincia”.
Según explicó la funcionaria, la tasa de mortalidad infantil es un indicador fundamental del estado de salud de la población. Cabe aclarar que la mortalidad en la provincia se estudia todos los años y, luego, cada tres años, para buscar el análisis de la tendencia de la serie. Si se observa año a año, se produjeron 17 defunciones menos que en 2020. El 75% de las muertes infantiles ocurrieron en los primeros 27 días de vida. Las causas fueron perinatales (52%), 33% malformaciones, 3% externas y 3% infecciosas.
En números absolutos, significa que en 2021 se registraron 22.897 nacimientos, 2,4 menos que en 2020. Esto tiene que ver con las políticas públicas de salud sexual y reproductiva implementadas desde el Ministerio de Salud, las que permiten que las familias planifiquen los nacimientos y, por supuesto, con las bajas en el embarazo adolescentes.
Al respecto, la directora de Maternidad e Infancia de la Provincia, Mónica Rinaldi, resaltó que el dato no es menor, ya que se produce en plena pandemia. “Todos los equipos prenatales en cada una de las regiones sanitarias realizaron grandes esfuerzos para atender de la mejor manera los embarazos en el territorio”, dijo.
Rinaldi remarcó que las estrategias más relevantes para este logro fueron “el fortalecimiento de la regionalización, el sostenimiento de los controles prenatales a pesar de la pandemia, continuidad de los cuidados garantizando turno en atención primaria desde el alta de la maternidad (alta conjunta) tanto para el niño como para la madre”; que los consultorios de los niños de alto riesgo continuaron funcionado y la aplicación del anticuerpo contra el virus sincitial respiratorio en los hospitales regionales”.
“El anticuerpo Palivizumab está dirigido a los niños nacidos con menos de 1.500 gramos o 32 semanas y los niños con cardiopatías complejas”, explicó la funcionaria. Es un anticuerpo monoclonal producido por tecnología de ADN recombinante utilizado para la prevención de la infección del virus sincitial respiratorio (VSR) en bebés de alto riesgo por prematuridad, enfermedad cardíaca congénita clínicamente significativa o displasia broncopulmonar.
Maternidades seguras
De los 22.897 nacimientos, 55% se realizó en efectores públicos y 45% en privados. La tasa de prematurez de 6,8% y la tasa de extremo bajo peso al nacer es de 1,1%. Este último grupo es el que más riesgo tiene de morir en el primer año de vida.
En lo que respecta a defunciones infantiles, fueron 159 en 2021, es decir 17 menos que en 2020. De este modo, la tasa de mortalidad queda en 6,9 por mil nacidos vivos.
“Esto es un resultado de las maternidades con condiciones seguras. Desde hace muchos años trabajamos en ello y en 2019 salió una resolución que dice que las maternidades deben tener las CONE -condiciones obstétricas neonatales esenciales- para que sea un lugar seguro para atender tanto a la madre como al recién nacido”, comentó Rinaldi.
De este modo, explicó que 99,2% de los nacimientos en 2021 se dio en maternidades seguras. Esto significa que deben tener anestesia permanente, un obstetra las 24 horas, sangre segura y posibilidad de hacer una cesárea de urgencia en cualquier momento. “Desde el Ministerio se ha regionalizado la atención y hay maternidades seguras en todo Mendoza”, aseguró.
“La mortalidad posneonatal ha venido descendiendo y la mortalidad neonatal también bajó. La curva de mortalidad infantil sigue descendiendo hace muchos años”, dijo Rinaldi durante la conferencia de prensa.
Políticas que lograron bajar la mortalidad infantil
Estos números se han conseguido debido a políticas implementadas desde el Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes como:
✓Control prenatal precoz, oportuno y adecuado.
✓ Detección y derivación oportuna de alto riesgo.
✓ Regionalización y categorización.
✓ Atención de todos los nacimientos en maternidades seguras (CONE).
✓ Atención de los niños menores de 1.500 g en maternidades 3B.
✓ Inmunización de grupos de riesgo contra VSR.
✓ Continuidad de cuidados desde la maternidad hasta atención primaria de la salud (alta conjunta).
✓ Lactancia materna.
✓ Plan Provincial de Primera Infancia: capacitaciones a docentes de SEOS (servicios educativos de origen social) y agentes sanitarios.
Datos históricos
La mortalidad materno-infantil:
- 2010: 11,4
- 2011: 9,6
- 2012: 9,3
- 2013: 9,7
- 2014 y en 2015: 8,5
- 2016: 7,7
- 2017: 7,6
- 2018: 8
- 2020: 7,5
- 2021: 6,9
Embarazo adolescente 2021
“Mendoza registró una disminución histórica del embarazo adolescente. “En el 2019 estaba en 9,7; en 2020 pasó a 8,3 y en este 2021 bajó a 7,5. Esto habla de un sistema sanitario comprometido, presente y que trabaja interdisciplinariamente con otros programas”, afirmó Nadal.
Por otro lado, la jefa del programa de Salud, Sexual y Reproductiva, Valentina Albornoz, informó que esto se debe a una política clara de Salud. “Trabajamos codo a codo con la Dirección General de Escuelas para que todos los adolescentes tengan acceso a la salud. Además, desde el programa estamos trabajando mucho con la comunidad a través de los municipios, donde estamos vinculando a los jóvenes con el sistema de salud y su acceso”.
Para bajar los índices, el Programa de Salud Sexual y Reproductiva se ha centrado en dos grandes ejes: el primero tiene que ver con la capacitación de los equipos de salud para lograr espacios receptivos de los adolescentes y el segundo tiene que ver con la búsqueda activa a los jóvenes en el territorio o la escuela.