Frente a la decisión de extender las horas de clases de los estudiantes mendocinos de nivel primario a partir de agosto, donde pasarán de 4 a 5 horas, José Thomas, director General de Escuelas, analizó la decisión y aseguró que "Nación asumirá el 80% de inversión"
"En Mendoza, particularmente todas las jurisdicciones, tenemos que firmar un convenio bilateral con Nación, pero lo importante de lo que firmamos el miércoles es que este convenio va a ser por 5 años en donde la Nación se compromete a asumir el 80% de la inversión para poder sumar el tiempo de jornada”, explicó Thomas en diálogo con LVDiez.
A su vez, consultado respecto de la operabilidad y la aplicación del cambio, Thomas especificó que en algunas escuelas van a intentar "que sea más tiempo todavía”. La DGE tiene relevadas 50 escuelas, y adelantaron que intentarán que "sean algunas más y empezar a trabajar en un plan”.
“La idea es empezar en agosto con algunas escuelas, pero que sea un plan progresivo de aumento de jornada en consenso con la comunidad educativa, con la realidad del lugar y con la infraestructura, porque obviamente no en todos los lugares podemos y tendiente a de a poco poder lograr una mayor jornada en todas las escuelas primarias de Mendoza”, expresó Thomas.
Respecto de la currícula invertida en ese tiempo extra, el funcionario dijo que estará centrado "en lengua y matemáticas y con metodologías muy dirigidas para recuperar un poco los saberes perdidos a la luz de las pruebas Aprender".
"Nosotros ya hicimos el ejercicio el año pasado, que nuestra jornada extendida estuvo focalizada en alfabetización y la verdad es que los resultados fueron buenos, alentadores”, sumó.
Thomas explicó que este cambio no es tan radical en la ruralidad, en términos de organización en las escuelas, y que incluso "en algunos lugares los chicos ya están llegando media hora antes hasta se van un poco después porque el tiempo del transporte que va a varias escuelas tiene su ritmo”.
Reconoció que en algunos edificios se presenta el problema de los dobles turnos: "Hay mañana y tarde, con muy poco tiempo entre uno y otro, y es mucho más difícil lograrlo. Obviamente que en los centros urbanos el tema del transporte con media hora sí hay una diferencia importante y sobre todo en el medio día, si adelantas uno y retrasas otro haces un caos que es imposible”.
Y agregó: “También tenés otro problema que son los docentes que trabajan doble turno y hay que contemplar esa realidad para ver cómo ir resolviendo esos conflictos que también algunas escuelas proponen distintas formas de resolverlo”.
A pesar de las dificultades a las que puedan enfrentarse al aplicar los cambios, Thomas defendió la medida: "Que los chicos estén media hora más en las escuelas es mejor que esté media hora más que en cualquier otro lugar siempre. La escuela para muchos sectores de la sociedad es un lugar de absoluta contención".
“Es verdad que cantidad no es calidad, es una frase que escucho mucho y me irrita un poco, porque está claro que cantidad no es calidad. Ahora sin cantidad no hay calidad, si la cantidad es cero la calidad es cero. Vos tenés que empezar a agregar cantidad y ahí adentro ponerle calidad. Eso es lo que hicimos el año pasado con la extensión de jornada y eso es lo que queremos hacer con esta media hora, una media hora con calidad”, aseveró.
Pruebas Aprender
El Ministerio de Educación de la Nación publicó este martes los resultados de las pruebas Aprender de 2021. En la provincia, los exámenes de calidad permitieron saber que los estudiantes mendocinos mejoraron en Matemática, pero empeoraron en Lengua, respecto de las evaluaciones tomadas en 2018.
En términos generales, la DGE sostuvo que "en nuestra provincia, tanto en Lengua como en Matemática, como en los niveles socioeconómicos bajos, medios y altos, la variación interanual se movió entre 2018 y 2021 de una manera más favorable en términos comparativos que respecto al total de Argentina".
En este sentido, consignó: "Generalizar que el 40% de los chicos del sexto grado no entiende nada de lo que lee, es un extremo, no es eso lo que indica la prueba Aprender. Básicamente, lo que tiene Aprender es una cantidad de objetivos que en el examen demuestran que no están a la altura que debería estar sexto grado, no es que no lee nada o que no entiende nada, es que no está al nivel del sexto grado. Lo cual si esos chicos estuvieron un año fuera de la escuela, por la no presencialidad y un año con burbujas, es casi lógico que no estén a la altura de sexto grado".
"Lo grave de eso es que si un chico que está en sexto grado no está en el nivel que tiene que estar, en séptimo va a estar peor, en primero del secundario va a estar y probablemente no termine la secundaria porque la capacidad que mide es si está preparado para lo que viene básicamente”, analizó Thomas.
El funcionario reconoció que en los estudios sobre fluidez lectora, detectaron que había problemas y que lo consideran "grave" ya que "cuando no tiene fluidez el chico no lee y menos va a entender”.
Y amplió: “Si un chico lee 30 palabras no es lo mismo que leer 80 en un minuto, porque aparte el procesamiento mental de un chico que lee 30 palabras por minuto y uno que lee 80, el que lee 30 el cerebro va tan lento que no puede proyectar lo que está leyendo”.