Cuando se espera que el INDEC de a conocer la próxima semana el indice de inflación correspondiente a marzo, el Gobierno acordó con la CGT para eximir del pago del impuesto a las Ganancias los adicionales salariales de unos de 600.000 trabajadores, una medida que entraría en vigencia oficialmente a partir del lunes.
La resolución acordada por Sergio Massa apunta a mitigar la pérdida progresiva del poder adquisitivo de los beneficiarios al escindir del tributo el pago de bonos por productividad, movilidad, viáticos y horas extras.
En el contexto de la negociación para definir un esquema de paritarias basado en "acuerdos trimestrales", el titular del Palacio de Hacienda dialogó con los principales dirigentes de la CGT para ultimar los detalles de la nueva norma.
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Desde la cartera de Economía se indicó que Hugo Moyano, Héctor Daer, Carlos Acuña, Andrés Rodríguez y Jorge Solá habrían participado en varias reuniones para disminuir en lo inmediato el impacto del tributo en los bolsillos golpeados por una inflación que no da tregua.
Todo indica qu el índice de inflación de marzo ser´ más alto y en abril hay señales de desaceleración mínima.
De acuerdo con las estimaciones del Gobierno Nacional, la medida tendría por efecto una mejora del salario que rondaría entre el 6% y el 13%, gracias a los conceptos que serán eximidos del pago del impuesto.
Entre ellos, cabe mencionar los bonos por productividad, fallo de caja, viáticos, movilidad, horas extras, adicionales por turno rotatorio y demás compensaciones que serán detalladas este lunes mediante un dictamen de la Subsecretaría de Ingresos Públicos (SSIP) a la par de una resolución de la cartera de Economía y la Agencia Federal de Ingresos Públicos (AFIP). El beneficio se extenderá sobre los salarios correspondientes a aquellas actividades que contengan 'los adicionales' mencionados y al mismo tiempo estén alcanzados por el impuesto a las Ganancias, lo que representa un total de unos 600.000 trabajadores.
El acuerdo de Massa con la cúpula de la CGT se da en el marco de un escenario económico que no coincide con las proyecciones trazadas inicialmente por el ministro de Economía, quien esperaba estabilizar la suba de precios en torno al 3% desde abril.
La expectativa de inflación proyectada por el mercado aumentó al 7% para marzo y al 110% anual para este año, según el relevamiento realizado por el Banco Central.
En el tercer relevamiento del año, los analistas estimaron una inflación anual que se ubica 10,2 puntos por arriba del pronóstico de la encuesta previa. Quienes mejor pronosticaron esa variable en el corto plazo (TOP-10) también esperan una inflación del 7% para marzo y de 108,5% para 2023, 5,7 puntos mayor a la encuesta de febrero.
De acuerdo con el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), para febrero la mediana de las estimaciones de quienes participaron en la encuesta previa del REM sugería una inflación de 6,1% mensual, en tanto que el dato observado en ese mes fue de 6,6% (0,5 puntos porcentuales mayor al pronosticado).