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Los propietarios de los departamentos usurpados siguen si aparecer y la demolición se demora 

Desde el Gobierno municipal afirman que hubo "advertencias y múltiples notificaciones" para localizar a los dueños

Redacción
09/09/2024 13:55
Foto / Web.
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Luego de que la Municipalidad de Guaymallén propuso hacerse cargo de los trámites de demolición del edificio abandonado en calle Manuel A. Sáez 3080, los propietarios de los departamentos siguen faltando a los reiterados llamados para proceder con los trámites de demolición. Ya que antes las partes deben acordar los marcos legales para el procedimiento.

Sucede que desde el Gobierno municipal, anticiparon que afrontaran el gasto de derribar el edificio, "estimado en varias decenas de millones de pesos". No obstante, los propietarios tendrán que reintegrar esos recursos al Estado.

A pesar de las advertencias y múltiples notificaciones, los propietarios del edificio ubicado en San José, no han respondido, ni se han presentado ante las autoridades municipales para acordar los pasos necesarios antes de proceder a la demolición del mismo. 

La situación del edificio, que lleva más de 7 años en estado de abandono, ha empeorado drásticamente en los últimos días debido a tres nuevos incendios que profundizaron el daño a su estructura.

El estado de deterioro del inmueble generó que se lo catalogara como de riesgo 1, la clasificación más alta de peligro, lo que implica que podría derrumbarse e incluso poner en peligro la vida de los vecinos y cualquier posible ocupante. 

En respuesta a esta crisis, el municipio está realizando un esfuerzo significativo para gestionar legalmente la demolición del edificio.

Recordamos que el edificio está deshabitado desde el año 2017, debido a su peligro estructural, lo que representa una grave amenaza para el vecindario; sin embargo, el fuego empeoró la situación y dañó los apuntalamientos que había puesto el municipio. En este contexto la demolición se presenta como la única solución posible y definitiva. 

El municipio restableció el apuntalamiento y tapiado de la estructura para evitar el colapso de la misma. La comuna no tiene dominio sobre la propiedad, pero la actual administración ha priorizado el bienestar y la seguridad de todos los vecinos. 

 

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