Al pie de la Cordillera de los Andes, y a 230 kilómetros de la ciudad de Mendoza, el sur te invita a descubrir bellezas naturales, grandes experiencias y adrenalina.
Diversión, naturaleza y aventura, hacen de este lugar una verdadera opción turística gracias a la conjunción de sus imponentes paisajes con actividades para hacer.
A continuación, te dejó los imperdibles lugares para que disfrutes.
Dunas El Nihuil
Muy cerca de la gran masa de agua del lago de El Nihuil, una inmensa superficie de treinta mil hectáreas de arena, maravilla al viajero que se adentra en este paraje.
Desafiantes dunas de gran altura que cambian de forma con gran frecuencia por acción de la naturaleza, invitan a vivir una experiencia única. La excursión se hace en vehículos de doble tracción con guías especializados.
Recorrer este lugar único se transforma en una aventura fascinante para toda la familia. Una mezcla de adrenalina, paz, asombro y disfrute sorprenderán a quienes se animen a descubrir este paraje bajo el azul cielo sanrafaelino.
Cañón del Atuel
A pocos kilómetros de la ciudad de San Rafael se encuentra este lugar milenario único por sus característicos y su belleza. Se trata de un cañón que forma el Río Atuel a su paso.
Para llegar, un serpenteante camino consolidado recorre paisajes geológicos que dejan maravillados a quienes se internan a través de las numerosas y variadas figuras que el viento, el agua del Río Atuel y el tiempo supieron tallar. Cada una tiene un nombre, algunas son: El Mendigo, el Bosque de Coníferas, los Jardines Colgantes, El Elefante, El Sillón de Rivadavia, Los Monstruos, el Lagarto, y muchas más.
El recorrido, de 60 kilómetros aproximadamente, se encuentra acompañado por el resto de las centrales hidroeléctricas del sistema de generación de energía del Atuel, a la vera de cuyos embalses (Aisol y Tierras Blancas) se forman encantadores espacios verdes, ideales para realizar actividades como mountain bike, avistaje de cóndores, montañismo, senderismo y trekking, entre otras.
Dique Los Reyunos
A 35 Km de la ciudad de San Rafael, nos encontramos con la presa Los Reyunos, un hipnotizante espejo de agua que combina verdes y turquesas.
La particularidad que tiene este espejo de agua artificial es que es uno de los poco diques del país que cuenta con el sistemas de rebombeo permitiendo recuperar el agua erogada al invertir sus turbinas para volver a reutilizar este importante elemento para este gran oasis del sur mendocino.
En este lugar se pueden realizar distintas actividades como pesca de salmónidos y pejerreyes; alquilar embarcaciones, realizar cabalgatas, caminatas y mountain bike; buceo, tirobangi, rappel, senderismo y un sinfín de otras prácticas que conjugan a la perfección con el majestuoso entorno natural.
Salinas del Diamante
Se encuentran a sólo 68 kilómetros de San Rafael. Es un enorme cúmulo de sal a cielo abierto que se formó por la evaporación de agua de mar que, por el movimiento de la tierra, había quedado estancada formando una laguna.
Se trata de un manto blanco que contrasta con las montañas como telón de fondo. En el predio también hay un museo, en el que hay muestras de granos de sal de ?los 4 salares más importantes de América: Uyuni (Bolivia), Salinas Grandes (Argentina), Atacama (Chile), y Maras (Perú). También hay mapas explicativos, fotos de cómo se realizan las extracciones, y un puesto de venta de sales comestibles y sales para baños.
El recomendado
En qué lugar quedan las Salinas del Diamante
Están ubicadas a 80 kilómetros de la ciudad de San Rafael, y se puede llegar hasta ellas manejando por la Ruta Nacional 144; o contratando alguna excursión en el pueblo El Nihuil, o en Valle Grande, o en la ciudad de San Rafael.
La ruta de acceso es toda de asfalto, sólo hay un camino de 400 metros de ripio tras el desvío de la ruta que anuncia el ingreso a las salinas.
La Visita a las Salinas del Diamante
Si bien las salinas son propiedad privada, desde el verano 2015 la familia Remaggi, que administra el establecimiento desde 1916, decidió abrir las puertas al público. Además de fotos que reflejan el paso de la historia por este sitio, incluyen un museo de sal, donde se pueden ver y comparar las diferentes texturas y colores de las sales, dependiendo de su lugar de origen.
La visita al Museo y a las salinas es un lugar imperdible, también encontraras la capilla de Nuestra Señora de Schoenstatt; lugar con mucha paz y belleza.
En el museo hay muestras de granos de sal de los 4 salares más importantes de América: Uyuni (Bolivia), Salinas Grandes (Argentina), Atacama (Chile), y Maras (Perú). Hay mapas explicativos, fotos de cómo se realizan las extracciones, y un puesto de venta de sales comestibles y sales para baños. El Museo, en realidad, es más bien un centro de información.