El fin de temporada encontró a Julia Zuccardi activa como siempre y dándole cierre al ciclo de presentaciones artísticas en la Sala de Arte de Bodega Santa Julia, en la que expuso el afamado escultor Elio Ortiz.
En su rol como jefa de hospitalidad y de turismo de este espacio, que se ha convertido en un clásico del arte plástico mendocino, la anfitriona dejó sus impresiones a modo de balance en este 2024 y las perspectivas de proyección para el año venidero.
- ¿Cómo expresarías tu visión acerca de este ciclo anual que sigue convocando y estimulando a creadores locales?
- Terminamos el año contentos porque siempre el objetivo es que nuestra sala de arte tenga vida, buscando que sea un espacio donde artistas locales mendocinos puedan mostrar su arte y, como todos los años, hacemos entre cuatro y cinco muestras anuales.
- ¿De qué modo realizás la evaluación acerca de lo que deja 2024 en este ámbito?
- Este año han sido cinco muestras y han tenido el ritmo que nos gusta que tenga, ya que son exposiciones que están aproximadamente entre dos y tres meses para que todos nuestros visitantes puedan recorrer y conocer. Todo ha sido positivo y vale destacarlo.
- ¿Y tu punto de vista acerca de esta última muestra anual?
- Representa, también, la alegría de cerrar la última exposición anual con la muestra de Elio Ortiz, quien es un artista súper talentoso y, además, amigo de la familia, de la casa y nos acompaña siempre..
- ¿Lo definís como un año de expectativas cumplidas?
- Sí, la verdad es que cerramos un año muy positivo y siempre contentos de esto, ya que la sala de arte sigue siendo un espacio con vida y con la posibilidad de acercar el arte local a nuestra bodega.
- Cabe imaginarse tu satisfacción porque es un poco el legado de tu abuela, por todo lo que ha apoyado Emma a los artistas locales y lo valioso que significa el seguir en pie y vigente.
- Claro, porque esto es el resultado de un trabajo muy apasionado que hizo mi abuela desde hace muchos años y ella fue la que creó esta sala de arte y la que trabajó con mucha constancia en que así fuera.
- Aquél objetivo se mantiene en el tiempo y en proyección de continuar, en síntesis.
- Es lo que nos propusimos: hacer exposiciones permanentemente, darle un espacio al artista local y poner en valor el arte mendocino. Así que también esto suma a esta felicidad de poder continuar con su legado y hacerlo. A ella era una de las cosas que más le gustaba, junto a estar en contacto con el arte y con los artistas.
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¿Qué mensaje final quisieras dejarle a la comunidad, tanto local como a los visitantes ocasionales?
- Que me gustaría invitar a la sala para que se acerquen, ya que tenemos la suerte en Mendoza de tener muchos artistas talentosos y no en cualquier parte del mundo se encuentran la calidad y la variedad de artistas que tenemos. Para nosotros es muy importante poner en valor eso porque es parte de nuestra cultura y, justamente, el vino es cultura porque la combinación vino y arte es una experiencia cien por ciento cultural.
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