Horas después de haber sido consagradas soberanas de la Vendimia y haber participado en una emotiva edición de la Serenata de las Reinas, Agostina, quien representó a Ciudad de Mendoza, y Rocío, de San Carlos, recibieron a periodistas y funcionarios en las terrazas de Park Hyatt Mendoza.
En la oportunidad, estas mujeres mendocinas hablaron de sus proyectos, de lo que implica este nuevo rol y de la necesidad de trabajar en conjunto con las demás reinas departamentales.
Distendidas y entusiasmadas con la posibilidad de expresar sus ideas ante los medios, las reinas fueron contundentes desde el principio de la charla: “Estamos muy contentas y emocionadas. Estamos cumpliendo un sueño juntas”.
Claramente emocionadas, Agostina y Rocío comentaron que se miran y se ríen, “porque no tomamos dimensión de todo esto”.
Por su parte, la virreina contó que, tras su paso por el Frank Romero Day, revisó su cuenta de Instagram y se habían duplicado los seguidores. “Es mucho el amor y el cariño que nos están dando”, expresó.
Agostina prefirió solo tomar contacto con su familia y descansar, para poder afrontar todas las obligaciones que vendrán. Pero no dudó en remarcar: “No puedo creer el haber hecho historia”, en referencia a que ella es la primera reina nacional de la Vendimia que tiene la Ciudad de Mendoza.
Cumplir metas
Cada una de las representantes departamentales cuenta con un proyecto de carácter social o cultural. En el caso de Agostina, busca desarrollar acciones que permitan la inclusión social de personas ciegas. “Queremos escuchar a nuestro pueblo y llevar adelante todos los proyectos de nuestras compañeras de cada departamento”, anunció.
Por su lado, Rocío comentó que, como artista, busca incentivar a las nuevas generaciones para que se inserten en el mundo de la cultura. Para eso, ambas coincidieron en que es fundamental seguir capacitándose, para poder “representar a nuestra provincia y ser voceras de la gente”.
Tanto la reina como la virreina enfatizaron el hecho de que toman todo lo que están viviendo como una experiencia y no como una competencia. “Vamos a trabajar junto a las demás reinas departamentales. Necesitamos a nuestras compañeras y a nuestro equipo, para poder cumplir los proyectos”, remarcó Agostina.
“Somos reinas, embajadoras turístico-culturales, y la reina es parte de nuestra historia y de nuestro patrimonio cultural”, finalizaron las flamantes soberanas.