Un bebé debió ser internado en el Hospital Perrupato, en el departamento de General San Martín, luego de que su abuela lo dejara en el interior del auto que conducía para completar un trámite en el nosocomio con el fin de obtener la provisión de leche para el infante.
Ocurrió ayer al mediodía frente al hospital de referencia del Este de Mendoza cuando por suerte una médica observó la situación y de inmediato dio aviso a la guardia del Perrupato y una mujer policía logró sacar al niño que estaba vomitando debido al golpe de calor del que fue víctima.
Según la mujer, dueña de un Chevrolet Cruze gris en donde el bebé había quedado encerrado en el asiento de adelante y recostado en una butaca tipo huevito, se había bajado a hacer un breve trámite al hospital, ya que no conseguía que le dieran la leche para el niño.
El bebé quedó internado en la Sección Pediatría donde está siendo atendido por los profesionales del área con el fin de que se recupera del golpe de calor que sufrió
Intervino la ayudante fiscal Miriam Escudero quien ordenó la intervención del ETI, a cargo de Cecilia Polo. Esta dio órdenes de entrevistar a la abuela antes de que se le dé el alta al bebé.
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En este caso, dos empleados de seguridad detectaron a una bebé durmiendo adentro de un vehículo en la playa de estacionamiento, al rayo del sol.
La niña tenía un año y su madre se había bajado a hacer un trámite, dejándola sola en el vehículo y con las ventanillas subidas, es decir que dentro del auto no solo hacía calor sino que no había aire.
Los empleados llamaron al 911, llegó una ambulancia del SEC para asistir a la bebé, que quedó al cuidado de su madre, pero el caso quedó bajo investigación.