El proyecto de Ley de Boleta Única de Papel que llegó en revisión de la Cámara de Diputados obtuvo hoy dictamen al término de un plenario de las Comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia y Asuntos Penales de la Cámara de Senadores y será puesto a consideración en el recinto junto con una iniciativa presentada por un partido provincial que recibió el apoyo del Frente de Todos.
Sin embargo, si la iniciativa fuera puesta a consideración del pleno, de acuerdo con la cantidad de firmas obtenidas hoy, se presupone un virtual empate que, en este caso, no podrá ser salvado por la Vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, tal como lo establece el artículo 57 de la Constitución Nacional porque, por ser una ley que modifica el Código Electoral, necesita de la mitad más uno de los votos del total de la Cámara: 37.
Si la votación del proyecto terminara 36 a 36, de acuerdo con las normas, debería ser desechado.
En ese sentido, fuentes del oficialismo indicaron que no será convocada una nueva sesión hasta no tener los votos suficientes para aprobar la norma y convertirla en ley.
El dictamen que apoya el proyecto que vino en revisión de la Cámara de Diputados en junio de 2022 obtuvo el apoyo del radicalismo, el PRO, el Movimiento Neuquino y La Libertad Avanza, además de Cambio Federal.
En tanto, en el proyecto presentado por Mónica Silva, de Juntos Somos Río Negro, estamparon su firma los legisladores del Frente de Todos y del Frente Renovador de la Concordia de Misiones.
El proyecto que llegó de Diputados establece que el sistema de Boleta Única de Papel se aplicará para las PASO (aunque su derogación está incluida en el megaproyecto de ley de reforma del Estado que ayer ingresó a la Cámara baja) y las generales para elegir presidente, vicepresidente, senadores, diputados y legisladores del Mercosur, pero en estas últimas dos categorías solo aparecerán nombres y fotos de los primeros cinco candidatos.
Además, se permitirá votar la lista completa y utilizar, si así lo autoriza el sistema electoral provincial, el esquema BUP, pero se deberá hacer en boletas y urna separadas, tal como se hizo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en las últimas elecciones con las Boleta Única para elegir jefe de Gobierno.
Por otro lado, el proyecto también vuelve a autorizar el voto por correo electrónico a los extranjeros que se aplicó hasta las elecciones de 2019.
En cambio, el de Silva establece una boleta por categoría de elección nacional (Poder Ejecutivo, Diputados y Senadores, en caso de elegirse en ese turno); y la eliminación del botón para elegir toda las categoría de un solo partido y que el elector tenga que tildar una por una cada una.
La Libertad Avanza se apoya en un número de 39 legisladores para ganarle las votaciones al Frente de Todos, que cuenta con 33.
Sin embargo, como el dictamen del proyecto de Boleta Única venido en revisión de Diputados no contó con las firmas de sus tres aliados de Juntos Somos Río Negro y el Frente Renovador de la Concordia, los números quedarían empatados en 36.
De hecho, al principio del debate en Comisión, el documento de Silva era apoyado sólo por su autora y por los dos senadores misioneros. Además, había un tercer proyecto, presentado por la kirchnerista salteña Carolina Moisés, que iba a ser apoyado por el Frente de Todos.
Sin embargo, cuando el bloque mayoritario observó que se abría una grieta en la alianza entre La Libertad Avanza y los partidos provinciales, optó por bajar de la discusión el expediente de Moisés e ir con el de Silva.
Más allá de que se convoque o no a una sesión, el proyecto estará listo para ser debatido desde la próxima semana en el recinto.
De acuerdo con la Reglamentación, como el proyecto venido en revisión desde Diputados obtuvo la mayoría de las firmas, será puesto a votación en primer lugar; si ese no obtuviera los números necesarios, entonces se pasará a votar el de Silva y el kirchnerismo.