Este viernes, el Tribunal Superior de Justicia rechazó la apelación presentada por la querella en el caso de los rugbiers franceses Hugo Araudou y Oscar Jégou, quienes habían sido acusados de abuso sexual tras un incidente denunciado en Mendoza. Con esta resolución, se fijará una audiencia para dictar el sobreseimiento definitivo de los deportistas.
El caso remonta al 7 de julio, cuando una mujer denunció que había sido violada y golpeada por Jégou y Araudou, ambos miembros de un equipo de rugby francés que había viajado a la Argentina para un partido amistoso contra Los Pumas. Según el testimonio de la denunciante, conoció a Jégou en un boliche de Carrodilla y, tras una noche de fiesta, decidió acompañarlo al hotel donde el equipo se hospedaba en Mendoza. La denunciante afirmó que, una vez en la habitación, fue atacada por Jégou y Araudou, compañeros de cuarto.
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A raíz de la denuncia, ambos jugadores fueron arrestados y permanecieron detenidos en Argentina por varias semanas. Sin embargo, en agosto, la Fiscalía tomó la decisión de liberarlos, argumentando que la prueba disponible resultaba insuficiente para sostener una acusación de abuso sexual agravado. La resolución se basó en una revisión exhaustiva de los testimonios y en una aparente falta de coherencia en el relato de la víctima.
La defensa de los deportistas argumentó que la denuncia no estaba respaldada por evidencia suficiente y que no existían elementos para continuar con el proceso. Tras ser liberados, Araudou y Jégou regresaron a Francia, aunque el caso continuó abierto y sujeto a apelaciones. Ahora, con el rechazo de la última apelación por parte del Tribunal Superior, la causa entrará en su fase final con la audiencia de sobreseimiento.
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La decisión marca un punto culminante en un proceso judicial que ha sido seguido de cerca tanto en Argentina como en Francia, y que plantea una serie de preguntas sobre los límites de la evidencia testimonial y el peso de las pruebas en casos de violencia sexual.