Agustina Tramontana, una joven moza de 20 años, fue agredida por dos clientes en el conocido bar Maldito Perro de la calle Arístides Villanueva en la Ciudad de Mendoza. La Justicia ha tomado medidas al embargar la caja del establecimiento para asegurar una futura compensación por los daños sufridos por la joven, quien trabaja en el lugar en condiciones irregulares.
El abogado de Agustina, Emmanuel Romero, explicó que esta acción legal tuvo lugar el jueves por la noche. En ese momento, un martillero público retuvo un porcentaje de los ingresos para garantizar el resultado del proceso civil o una posible negociación.
"Además, se dictaminó una tutela anticipada de derecho que incluye la cobertura de las necesidades básicas de salud, ya que los dos acusados se han negado a hacerse cargo de estos costos a pesar de su responsabilidad en los hechos", informó el abogado.
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Agustina relató a radio Nihuil que, después de la brutal agresión que le propinaron, sufre de ataques de pánico y no ha podido reintegrarse al mercado laboral. Actualmente, toma medicamentos para la ansiedad y para dormir, además de recibir tratamiento psicológico para superar la situación y enfrentarse a la sociedad. "Estoy constantemente acompañada por mi familia y mi novio porque no puedo estar sola", dijo.
"Esto me sucedió a mí y podría ocurrirle a otras chicas. La violencia y el acoso son muy comunes en los bares, al igual que el empleo en negro", afirmó la joven, quien aún no ha recuperado por completo la audición de su oído izquierdo. Es posible que necesite someterse a una cirugía.
El bar Maldito Perro se encuentra en la calle Arístides Villanueva de la Ciudad.
José Luis Pericoli (35), uno de los agresores, admitió haber sido la persona que agredió a la chica y le causó graves lesiones en el rostro. Como resultado, fue condenado a 3 años de prisión en suspenso por los hechos ocurridos el pasado 14 de marzo. El otro individuo involucrado, Carlos Ramón Angulo (39), fue liberado después de ser acusado de hurto simple.
Pericoli, quien estuvo detenido desde el día del incidente, quedó en libertad sujeto a ciertas condiciones de conducta que debe cumplir para evitar que la sentencia se haga efectiva. La Justicia le ha ordenado recibir tratamiento psicológico y también le ha impuesto una orden de restricción para mantenerse alejado de la víctima.
En la madrugada del 14 de marzo pasado, Pericoli y Angulo se encontraban consumiendo bebidas en el bar Maldito Perro, ubicado en la popular calle Arístides Villanueva de la Quinta Sección.
Según la reconstrucción de los hechos realizada por la Fiscalía, el primero de ellos se acercó a la caja registradora y sustrajo un posnet. Los empleados del establecimiento se percataron de la situación y recuperaron el dispositivo, pero también les pidieron a los agresores que abandonaran el lugar. Esto generó un altercado donde Agustina resultó gravemente herida al recibir un golpe en el rostro con uno de los vasos, lo que le causó cortes y hematomas.
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