Es la primera vez que se realiza en Mendoza, la misma se trata de una fusión de dos técnicas: cirugía de craneoestenosis y cirugía endoscópica. El procedimiento quirúrgico es la única alternativa para el tratamiento de la craneoestenosis.
En pleno contexto de pandemia, profesionales del servicio de Neurocirugía del hospital Notti aplicaron una nueva técnica quirúrgica, la cual favorecerá el tratamiento de niños que sufren de craneoestenosis.
La craneoestenosis “se produce por el cierre de algunas suturas, es decir de alguna parte de los huesos del cráneo de los niños, eso no sólo provoca una deformidad del mismo sino que también a futuro puede provocar un deterioro del nivel intelectual del niño”, explicó el Emilio Pelleriti, Neurocirujano infantil y responsable de la cirugía.
Esta cirugía se efectúo a un niño de tres meses y medio de edad que sufría de craneoestenosis. Al respecto Pelleriti destacó: “el único tipo de tratamiento para esta patología es un tratamiento quirúrgico, se debe realizar antes de los 4 meses de edad”.
Así también el profesional explicó que: “Las técnicas quirúrgicas que nosotros realizamos son técnicas tradicionales traídas desde Francia y se denominan técnicas a cielo abierto. Es decir una técnica bastante complicada de tiempo prolongado, que requiere si o si una estadía en terapia intensiva que puede variar de dos a cinco días. Y que indefectiblemente necesita de una transfusión sanguínea. Es decir, es una cirugía muy compleja de alto riesgo”.
“Y en el contexto de la pandemia que estamos viviendo surgen diversas complicaciones que hacen que se deba permanecer menos tiempo en la internación, que exista la dificultad de ocupar camas en terapia intensiva por mucho tiempo y que las cirugías estén limitadas. Estos acontecimientos motivaron al equipo del hospital a aplicar esta nueva técnica lo cual permite que el tratamiento quirúrgico sea menos invasivo” agregó el neurocirujano.
“Esto nos otorga muchísimas ventajas, la primera es no utilizar la terapia intensiva y la segunda es que se reduce la necesidad de las transfusiones sanguíneas en solamente un 5 por ciento de los casos. El niño que nosotros intervenimos en el día de ayer, hoy mismo está siendo dado de alta, es decir que tuvo una estadía de internación de 24 horas no requirió de terapia intensiva y hoy está prácticamente asintomático y continúa su recuperación en su casa” puntualizó Pelleriti.
En cuanto a la incidencia de esta patología, la misma es variable dependiendo de qué tipo de craneoestenosis sea. Sin embargo, se estima que es uno cada 1000 o 2000 nacidos vivos.
Según la doctora Mariana Cuervo, quien también participó de la cirugía; “el tema más allá de la patología es cuando nos llegan los niños para ser evaluados, donde tenemos un tiempo límite como para poder hacer una cirugía ya sea endoscópica como hemos empezado ahora, o bien una cirugía a cielo abierto”.
Esto significa que es muy importante una derivación temprana del paciente ya que esta cirugía no puede aplicarse a niños de más de seis meses. “Por eso ahora queremos incitar mucho a la comunidad pediátrica a tratar de derivar a estos niños con anticipación, porque nos darían la posibilidad de hacer este tipo de cirugía que tiene muchos beneficios respecto a la otra”, finalizó Cuervo.
Desde la Dirección del Hospital Jorge Pérez destacó la importancia que tiene el Hospital en cuanto a la demanda de este tipo de cirugías ya que es el único hospital pediátrico de la región. Además, subrayó lo que representa esta cirugía disminuyendo la posibilidad de mantener a un paciente en terapia, por ende, reduciendo los riesgos para el mismo, así como también el manejo del dolor y la reducción del costo de los hemoderivados.