Mientras Rusia continúa con su invasión en Ucrania, el Banco Mundial tomó la decisión de suspender inmediatamente todos sus programas de crédito para Rusia y para Bielorrusia, según informó en las últimas horas a través de un comunicado oficial.
"Tras la invasión de Ucrania y las hostilidades contra el pueblo ucraniano, el grupo del Banco Mundial detuvo todos sus programas en Rusia y Bielorrusia con efecto inmediato", destaca el comunicado publicado hoy en el sitio web oficial de la entidad, en el que se destaca que actualmente tiene once proyectos en Bielorrusia, por un valor total de 1.200 millones de dólares, destinados a educación, transporte, energía y a contener la pandemia. En Rusia, por su parte, hay cuatro proyectos en curso por un valor de 370 millones de dólares, y la mayoría de ellos están destinados a cuestiones políticas.
La institución indicó que tenía aprobados nuevos préstamos para Rusia desde 2014, cuando Moscú invadió la península ucraniana de Crimea. Por otra parte, informó que su último proyecto aprobado con Bielorrusia, cuyo Gobierno es aliado de Moscú y ha facilitado el tránsito de militares rusos hacia Ucrania, es de mediados de 2020.
Esta decisión se da un día después de que David Malpass, presidente del Banco Mundial, anunciara una ayuda de emergencia para Ucrania de 3.000 millones de dólares, de los cuales al menos 350 millones podrían liberarse esta misma semana.
En un comunicado conjunto con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, Malpass advirtió el martes de los "efectos económicos significativos" en otros países del conflicto y las sanciones impuestas a Rusia.
Entre dichos efectos, ambos citaron el alza de los precios de las materias primas y el riesgo de aceleración de la inflación. "Las alteraciones en los mercados financieros continuarán empeorando si el conflicto persiste", concluyeron.