Un hombre que este jueves estacionó una camioneta junto a la biblioteca del Congreso, cerca del Capitolio y la Corte Suprema de EE.UU., en el que decía llevar material explosivo, se habría entregado a los agentes de Policía
El incidente se produjo a las 09:15 (hora local), cuando una camioneta negra sin matrícula se detuvo junto al edificio de la biblioteca del Congreso, cerca del Capitolio y la Corte Suprema de EE.UU. El conductor de la camioneta, que parecía sujetar un detonador, le dijo a un agente de Policía que tenía una bomba.
Según trascendió, en varios tramos de la negociación, el atacante expresó sus intenciones de hablar con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, e incluso envió un mensaje en vivo a través de Facebook en el que expresó que “la vida de los afganos estaba en manos” del primer mandatario.
“La revolución está en marcha, está aquí, estoy listo para morir por la causa “, fue otra de las frases que expresó en la transmisión donde además sostuvo que si intentaban acercarse a él no solo iba a hacer volar la camioneta sino que había otros cuatro dispositivos cercanos al lugar con más explosivos.
“Si quieres dispararme y arriesgarte a volar dos cuadras y media de la ciudad, porque para eso son esas cajas”, le expresaba a Joe Biden mientras mostraba la parte trasera de la camioneta. “No quiero eso, quiero irme a casa”, sostenía el individuo luego en la grabación.
Todo comenzó cerca de las 10 am (hora Washington D.C.) cuando este hombre estacionó su camioneta frente a la biblioteca del Congreso norteamericano y se emitió el alerta de desalojo del Capitolio por temor a un atentado.
Finalmente, el atacante que mantuvo en vilo a Estados Unidos fue detenido por la Policía.