La tendencia creciente de la recaudación nacional continuó en noviembre (59,5% i.a.), impulsada por el desempeño de los tributos del comercio exterior y los recursos de la Seguridad Social. La recaudación de los impuestos ligados a la actividad económica también contribuyó en dicha expansión. Vale remarcar que las elevadas tasas de crecimiento se sostienen incluso frente a una base de comparación afectada cada vez en menor medida por los efectos de la primera ola de la pandemia en 2020.
Así, la recaudación de noviembre se ubicó, a precios constantes, en valores similares a los de 2017, superando lo registrado en el período 2018-2020 para el mismo mes. Vale destacar que el retorno a esos niveles se alcanzó bajo un cambio en la estructura tributaria, caracterizado por un incremento en la participación de los tributos que otorgan progresividad al sistema. Esta dinámica fue resultado de las reformas introducidas a través de la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en diciembre de 2020, orientadas a establecer un esquema que favorezca el crecimiento con inclusión social. De esta forma, a los once meses de 2021, la recaudación acumulada se ubicó en niveles superiores a los de pre-pandemia.
Particularmente se destaca el desempeño de los tributos asociados a la Seguridad Social (69,7% i.a.), que registraron una aceleración con respecto al mes anterior por segunda vez consecutiva. Su contribución al crecimiento de la recaudación nacional continúa incrementándose, consolidando así el buen desempeño de una fuente de ingresos fundamental para garantizar la sustentabilidad del sistema de Seguridad Social y de las finanzas públicas en general. En cuanto a los factores que explican esta dinámica, vale resaltar el proceso de recuperación de los salarios tras los distintos acuerdos paritarios. En particular, los Aportes Personales exhibieron una suba de 66,0% i.a., mientras que las Contribuciones Patronales crecieron al 69,2% i.a. Cabe mencionar que la recaudación de estas últimas se encuentra afectada por las exenciones otorgadas por el Estado Nacional, para aliviar la carga tributaria al sector de la Salud, los sectores críticos del programa REPRO 2 y las provincias del Norte Grande.
Con respecto a los tributos del comercio exterior, continuaron registrando altas tasas de crecimiento (87,4%). El principal impulso fue aportado por los Derechos de Exportación, con un aumento de 95,4% i.a.; por otro lado, los Derechos de Importación y Tasa Estadística crecieron en su conjunto 71,8% i.a.
Por otra parte, los tributos ligados a la actividad económica crecieron un 61,5% i.a. Dentro de este grupo, vale destacar el incremento de los asociados al consumo, como el IVA impositivo (55,4% i.a.), el impuesto a los Combustibles (65,3% i.a.) y los Internos Coparticipados (55,8% i.a.). También exhibieron un buen desempeño el IVA aduanero (78,1% i.a.) y el Impuesto a los Créditos y Débitos (58,7% i.a.). Respecto a este último, cabe aclarar que continúa vigente la exención al sector Salud.
El Impuesto a las Ganancias creció 45,8% i.a., bajo los efectos de las recientes reformas implementadas para aliviar la carga tributaria de los trabajadores y las trabajadoras en relación de dependencia. A su vez, dicho efecto se vio acentuado por la devolución a dichos contribuyentes de la última cuota correspondiente a diferencias adeudadas de meses anteriores.
Por último, la recaudación de Bienes Personales presentó una caída interanual debido a un menor ritmo de ingresos de pagos atrasados.