El ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, afirmó que se reunirá con representantes del Banco Central y de las entidades financieras más importantes del país para definir la modalidad de pago de los créditos UVA, cuyas cuotas en ningún caso podrán superar el 35% del ingreso familiar.
“Vamos a tener una reunión mañana con el Banco Central y los bancos que tienen más cantidad de estos créditos para generar este mecanismo (de pago de las cuotas) y preservar la vivienda, para que ningún argentino tenga que pasar la zozobra de perderla”, señaló Ferraresi durante una entrevista radial en AM 750.
El ministro admitió que es “un tema complejo, porque parte de un acuerdo entre privados”, aunque dejó en claro que el Gobierno atenderá a los “más vulnerables y ningún crédito podrá superar el 35% del ingreso familiar”.
Ferraresi insistió en “el tema es muy difícil porque hay un universo muy heterogéneo”, y puso como ejemplo que “el 35% de los tenedores (de esos préstamos) compran dólares todos los meses”.
“Otro casi 40% son empleados bancarios, que han tenido salarios por arriba de la inflación, por eso buscamos generar un mecanismo para salvaguardar a los más vulnerables”, remarcó.
Agregó que con una inflación de 35 puntos y un aumento salarial de 34, las cuotas se han congelado durante el último año, y por lo tanto a partir de ahora, en febrero, el aumento de los créditos menores a $ 8 millones estarían en 6% y por encima de esa cifra, de 9%.
En ese monitoreo permanente se estima que más del 20% ya canceló sus obligaciones, continuó el ministro.
De todos modos, aclaró, “no es un tema que esté en jurisdicción de resolver este ministerio, es una cuestión financiera”.
“Porque los créditos no generaron un proceso de producción para comprar unidades nuevas”, precisó el funcionario.
Ferraresi también se refirió, en este marco, a la política habitacional de su gestión y brindó detalles de la agenda para los próximos años.
“Vamos a construir 120.000 viviendas en los próximos tres años, más 20.000 que estamos recuperando del Procrear, más 55.000 de las que quedaron paralizadas durante el gobierno anterior, que habían sido iniciadas en las gestiones de Néstor y Cristina (Kirchner)”, añadió.
Por otra parte, sostuvo, el Gobierno tomó la decisión de que ningún crédito hipotecario nuevo se genere a través de UVA sino de la fórmula HogAr, que tiene que ver con un recupero solidario y no financiero, a través de los bancos, sino en un proceso de clase social ascendente”.
“Cada provincia o municipio sabrá cuál es el grupo de habitantes a quienes se adjudica y el tope de la cuota, que no superará el 25% de sus ingresos, sean salarios mínimos o programas sociales”, concluyó el ministro Ferraresi.
A fines de diciembre el Gobierno anunció que comenzará a aplicar el coeficiente HogAr como referencia para los ajustes de las cuotas de los créditos del programa de viviendas Procrear, en reemplazo del sistema UVA y con el objetivo de dar previsibilidad a los tomadores de estas líneas crediticias.
El cálculo del coeficiente HogAr estará a cargo de la Secretaría de Desarrollo Territorial, que depende del Ministerio, y se aplica a partir de este mes, dado que en esta nueva etapa de Procrear se realizó en agosto pasado el primer sorteo, con unos 34.000 créditos otorgados para refacción y mejoramiento de viviendas, que contaban con cuatro meses de gracia.
El secretario de Desarrollo Territorial, Luciano Scatolini, sostuvo la semana pasada que la nueva fórmula “es una garantía absoluta, porque siempre va a ser un cálculo favorable para las familias”.
El coeficiente HogAr -a diferencia del sistema UVA, que evoluciona según la inflación-, se calcula de acuerdo con la evolución del Coeficiente de Variación Salarial (CVS) entre el último día del quinto mes anterior y el último día del cuarto mes anterior al cual corresponda el ajuste.
El ajuste no podrá exceder en más del 2% al ajuste de capital que hubiese resultado de aplicar el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) desde el último día del mes que corresponde al pago de la primera cuota, siguiendo el mismo procedimiento aplicado para el ajuste por CVS.
Scatolini explicó que el objetivo es tener “un sistema de crédito accesible y transparente que dé a las familias argentinas previsibilidad a la hora de tomar un crédito”.
“Una familia argentina ahorra o se esfuerza en base a su trabajo, que se traduce en su ingreso; queremos dar certeza a quien trabaja, de que va a pagar de acuerdo con ese ingreso que genera su actividad laboral”, detalló.
Por otra parte, el formato HogAr se divide en cuatro segmentos según el nivel de ingreso, por lo cual a menor ingreso, menor es la tasa de interés que los beneficiarios pagan.