En el jueves de última chance, seis participantes de Masterchef Celebrity tuvieron que competir por el único lugar del balcón que les permitiera evitar la tan temida gala de eliminación. Pero se trató de una contienda inédita en lo que va del certamen, ya que se trató de una prueba mixta en la que los jurados se pusieron en la piel de los participantes, pero solo por un rato.
Los tres chefs fueron al mercado para sentir esa adrenalina de cargar las canastas en apenas tres minutos. Por orden de edad descendentes, fueron pasando a las estaciones y el conductor Santiago del Moro pasó por cada una de ellas para realizar el sorteo correspondiente.
El azar determinó que Cateherine Fulop y Mica Viciconte fueron con Damián Betular; Marcela Tigresa Acuña y Mery del Cerro les tocó Germán Martitegui, mientras que Luisa Albinoni y Paulo Kablan quedaron emparejados con Donato De Santis. Los chefs cocinaron en el más estricto silencio hasta que sonó la tan temida chicharra. A partir de entonces, volvieron a su lugar habitual y los participantes tuvieron que repartirse los ingredientes para continuar con la competencia.
En este momento, el improvisado trío entre Betular y las bautizadas “Chicas fits” empezó a mostrar su primera grieta. Primero, las mujeres se quejaron de la poca información que les mostraba el chef, que quiso mostrarse fiel a las reglas. Luego la pelea fue mano a mano entre ellas. Lo que ocurrió es que al sonar la chicharra y abandonar la estación, Mica se quedó con la mezcla que había hecho el pastelero, una actitud que fue tomado como un robo por la venezolana.
Desde entonces, más que concentrarse en sus respectivas preparaciones, ambas cruzaron acusaciones y defensas durante los 50 minutos que tuvieron para cocinar, algo que se incrementó cuando Fulop retiró la masa del pionono del horno antes que llegara a cocinarse. A la hora de las devoluciones, Mica pasó primero y se retiró con buenas sensaciones. Diferente fue cuando le tocó pasar a Cathy que debió improvisar una lasagna de pionono con frutas y crema chantilly.
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“Nuestro maestro no dijo nada, y Mica se roba lo único que logró hacer”, arrancó la acusación. “Yo perdí cinco minutos repartiendo los ingredientes y entonces me llevé el pionono. Fue un acuerdo”; se defendió la guardavidas. ”Mientras yo fregaba los platos”; protestó la venezolana, que continuó con su alegato en el backstage. “Ella con su carita,"con que voy a ser mamá", ingenia todo para que una pise el palito", acusó. “Acá lo que pasó con Cathy es que lo sacó antes del horno, no hubo un problema con la preparación”, respondió la pareja de Fabián Cubero.