Se están cumpliendo 40 años de la muerte de Julio Cortázar. No nos da la gana celebrar la muerte, cosa muy habitual en los argentinos. De pronto descubrimos la relación que hubo entre Cortázar y don Gildo, y decidimos homenajear a nuestro imprentero a partir de ese recuerdo del escritor. Un rebusque, una coartada para eludir la referencia a la “partida” del autor de Rayuela.