Según un informe del INDEC, y estimaciones del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), la pobreza descendió al 38,9% y la indigencia al 8,5% en el tercer trimestre de este año. Para el Gobierno nacional esto fue atribuido a la desaceleración de la inflación y los aumentos en planes sociales como la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Los mismos valores fueron difundidos luego por el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, que depende del Ministerio de Capital Humano.
Con estos valores la pobreza, que alcanzó al 52,9% en el primer semestre de este año, retrocedería a porcentajes similares al de un año atrás (38,5%) y por debajo del 44,9% del cuarto trimestre de 2023.
En tanto el 8,5% de indigencia es inferior al 10% del tercer trimestre de 2023, al 13,8% del cuarto trimestre de 2024 y al 18,1% de la primera mitad de este año.
Si esos porcentajes se extienden a toda la población (47,1 millones), la pobreza abarcaría a poco más de 18 millones de personas, de los cuales 4 millones serían indigentes.
En la primera mitad de este año el 52,9% de pobreza equivalía a 24.900.000 pobres y el 18,1% de indigencia a 8,9 millones porque carecían de ingresos o no les alcanzan para comprar los alimentos básicos. Son casi 7 millones menos de pobres y casi 5 millones menos de indigentes.
En base a los datos del INDEC, el especialista Leopoldo Tornarolli señaló: “ Esto va a sonar fuerte y estoy rechequeando porque sorprende: la pobreza en el semestre abril-septiembre habría estado por abajo del 45%, caída de 8 puntos respecto de enero-junio. Y en julio septiembre fue algo así como 38,5%. Si es así,2024 podría cerrar debajo de 2023”.
Este importante retroceso de esos 2 indicadores claves obedecería a que las canastas básicas de indigencia (compuesta de alimentos básicos) y pobreza evolucionaron en los últimos meses por debajo de la inflación y de los ingresos familiares.
La inflación fue empujada por los precios de los servicios, mientras se desaceleraron en los rubros vinculados a la alimentación. En el primer semestre del año pasó lo contrario: los ingresos de la población habían aumentado muy por debajo de las líneas de indigencia y pobreza.
A esto se agrega el aumento de la AUH (Asignación Universal por Hijo) y de las tarjetas alimentarias muy por encima de la inflación. La AUH pasó de $ 20.661 en diciembre de 2023 a $ 93.281 este diciembre con una suba de 351,5%.
Agustin Salvia, director del Observatorio de la UCA, dice que “se salió de la crisis de fines 2023/comienzos 2024” y así se alcanzaron los niveles de indigencia y pobreza históricos estructurales posteriores a 2015, con un piso entre el 30 y 35%", sostuvo.