"Cosecharás lo que siembras", dice un dicho, y así fue. Por primera vez en la historia, el Senado de la Nación le rechazó un Decreto de Necesidad y Urgencia a un Gobierno argentino. Se trata de un golpe para la gestión del libertario Javier Milei.
Si bien el resultado de la votación en Cámara Alta era un pronóstico predecible, lo curioso es que los legisladores de Unión por la Patria sumaron apoyo del bloque radical, luego de que el mandatario nacional semanas atrás atacó a los legisladores y calificándolos como "ratas".
Los que decidieron votar en contra fueron: Martín Lousteau, Pablo Blanco y de los patagónicos Edith Terenzi, Mónica Silva, Lucila Crexell, Juan José Carambia y Natalia Gadano. También votaron en contra Camau Espínola y Edgardo Kueider.
Sólo 25 senadores de los 72 que tiene la Cámara Alta votaron a favor del DNU. Además algunos senadores que la Rosada esperaba de su lado, se abstuvieron, como el radical Maxi Abad y la cordobesa Aljeandra Vigo, pareja de Juan Schiaretti.
De esta manera, el decretazo que dictó el presidente Javier Milei, en diciembre pasado, llegará a la Cámara de Diputados en los próximos días para su tratamiento y allí se definirá su futuro, de ser rechazado nuevamente, recién ahí quedaría sin efecto.
Su tratamiento fue motorizado por voluntad de la vicepresidenta de la Nación y titular del Senado, Victoria Villarruel, que lo incluyó en el temario oficial el martes pasado a sabiendas de que el rechazo era su destino final en el hemiciclo senatorial. La vice venía de resistir varios pedidos para tratar el mega-decreto en el recinto. Dos por parte del kirchnerismo y uno firmado por bloques federales, entre ellos, un radical.