En un giro que sacudió a la cúpula militar, el Gobierno anunció este jueves la destitución del brigadier Fernando Luis Mengo como jefe de la Fuerza Aérea Argentina. Nombrado hace pocos meses, su gestión quedó marcada por denuncias que incluyen el uso indebido de aeronaves oficiales y casos de acoso sexual que generaron indignación dentro y fuera de la institución.
Los vuelos privados del escándalo
Según fuentes oficiales, la decisión fue desencadenada luego de que Mengo utilizara aviones de la Fuerza Aérea para trasladar a su pareja, también miembro de la institución, entre Paraná y Buenos Aires, violando las normativas de uso de bienes públicos. Estos actos, calificados como una "grave falta de ética", fueron el punto de quiebre para las autoridades.
“El uso indebido de aeronaves con fines personales es una violación inaceptable a las responsabilidades del cargo”, señala el comunicado oficial firmado por el presidente Javier Milei y el ministro de Defensa, Luis Petri. Además, el documento destacó que se iniciarán las acciones legales y administrativas correspondientes para investigar los hechos.
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Denuncias que no podían ignorarse
A las irregularidades logísticas se suman acusaciones de acoso sexual contra el brigadier Mengo. Aunque no se han brindado detalles específicos, fuentes cercanas al caso indicaron que estas denuncias ya habían generado un clima de malestar entre las filas de la Fuerza Aérea. “No habrá tolerancia para el abuso de poder ni para conductas que mancillen la integridad de las personas”, afirmó Petri.
Mengo, de 55 años, había asumido el cargo en enero pasado tras un recambio de la cúpula militar impulsado por Milei. Con una carrera que comenzó en 1983, acumuló experiencia en operaciones de combate y planificación estratégica. Sin embargo, su breve paso como jefe de Estado Mayor quedará marcado por este abrupto final.
Una señal contundente
El Gobierno subrayó que esta medida forma parte de un compromiso más amplio con la transparencia y la ética en las instituciones públicas. “La confianza de la ciudadanía en nuestras Fuerzas Armadas es un pilar fundamental que no estamos dispuestos a comprometer”, cerró el ministro Petri.