En la ciudad de Curuzú Cuatiá de la provincia de Corrientes, un oscuro crirmen ha dejado a la localidad sumida en el dolor y la conmoción. Dos pequeños hermanos, Dylan de 8 años y Sofía de 5, fueron encontrados sin vida, víctimas de múltiples puñaladas. La presunta responsable de este horrendo acto es su madre, Aldana B., quien posteriormente intentó quitarse la vida.
Aldana B. se encuentra actualmente internada en el hospital Fernando Irastorza, donde se recupera de heridas superficiales ocasionadas en su intento de suicidio. A pesar de estar bajo custodia, su vida no corre peligro. La fiscal del caso, María José Barrero Sahagún, está trabajando en la calificación legal del caso, y se ha dispuesto la aprehensión de la mujer.
La clave para la imputación judicial recae en la salud mental de Aldana B. La fiscal ha solicitado la intervención de un equipo técnico interdisciplinario del Instituto Médico Forense del Poder Judicial para determinar si la acusada es inimputable. Este equipo también se encargará de analizar en detalle la escena del crimen.
La hermana de Aldana y tía de los niños fue quien descubrió la trágica escena. Después de no recibir respuesta a sus intentos de comunicarse y ser bloqueada en redes sociales, se dirigió a la casa de su hermana. Al llegar, fue recibida por Aldana, cubierta de sangre, quien le pidió silencio y le informó que los niños estaban durmiendo. Al entrar, descubrió a sus sobrinos sobre un charco de sangre, lo que la llevó a alertar a la Policía provincial.
Los bomberos y la policía confirmaron que los niños fueron asesinados con un cuchillo de gran tamaño. Dylan presentaba una herida, mientras que Sofía tenía al menos cuatro puñaladas, sugiriendo que habría intentado defender a su hermano.
Se especula que Aldana B. pudo haber sufrido un brote psicótico que desencadenó la tragedia. Sin embargo, los investigadores se muestran cautelosos y esperan el informe psiquiátrico de la mujer una vez que sea dada de alta.
En cuanto a la situación familiar, se presume que Aldana B. vivía con sus dos hijos, aunque aún no se tienen certezas sobre los detalles familiares. El padre de los niños, quien aparentemente no tiene relación con el incidente, fue informado de la tragedia y entró en estado de shock.
La escuela de Dylan rindió homenaje al pequeño en redes sociales, mientras que en el jardín de infantes de Sofía, se la recordó con profundo pesar. La comunidad de Curuzú Cuatiá se encuentra consternada por este doble crimen que ha conmovido a todos sus habitantes.
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