Se trata de Norma Ortubia, acusada por su propia hija como partícipe de los vejámenes. Fue imputada por abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.
Una mujer de 68 años fue detenida hoy e imputada del delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo”, en varios hechos y como partícipe necesaria, once años después de que la Justicia apresara a su marido por haber abusado a la hija de ambos durante 20 años.
La medida fue dispuesta por la fiscalía de Delitos Contra la Integridad Sexual en perjuicio de Norma Ortubia (68), esposa de Guillermo Lucero, detenido en 2009 y muerto un año después ya en prisión.
Lucero se hizo conocido a nivel nacional como el “Chacal de la Cuarta Sección”, por las reiteradas violaciones cometidas contra su primogénita, que provocaron que la víctima tuviera siete hijos.
Para el fiscal Gustavo Stroppiana, el delito no podría haberse concretado sin la colaboración de la acusada, por lo que la imputó como “partícipe necesaria de abuso sexual agravado por acceso carnal y por el vínculo”.
Por su parte, el representante legal de Norma Ortubia dijo que su cliente pertenece a los grupos de riesgo frente al coronavirus, aunque continuará detenida.
El 8 de mayo de 2009, Ortubia acompañó a su hija Cecilia Lucero (46) a denunciar a su esposo y padre biológico de la víctima por haber abusado de la hija durante 20 años. Como consecuencia de los reiterados abusos, Cecilia tuvo siete hijos.
Armando Lucero fue detenido e imputado por “abuso sexual agravado por el vínculo con acceso carnal en cantidad no determinada de hechos”, y días antes de cumplir un año detenido en el penal de Boulogne Sur Mer falleció internado por problemas de salud.
Tras la imputación y encarcelamiento del “chacal de la cuarta”, su esposa no fue alcanzada por la Ley y recién en 2018 la víctima decidió hacer una segunda denuncia contra su propia madre, al sostener que si su mamá no hubiera cooperado, el crimen no habría sido posible.
Ahora, la madre de la victima podría recibir una larga condena dado la imputación de “participe necesaria de abuso sexual agravado por acceso carnal y por el vínculo” que le endilgaron.