El gobierno chileno, encabezado por Gabriel Boric, ha emitido una orden de expulsión contra Facundo Jones Huala, líder de la organización radical Resistencia Ancestral Mapuche (RAM). La medida llega días después de que la Corte Suprema de Chile dictaminara que Huala había cumplido su condena, lo que llevó a su liberación inmediata. Según informó el portal BíoBío, el lonco argentino fue notificado de la resolución por la Policía de Investigaciones de Chile.
El fallo judicial y la expulsión
Facundo Jones Huala, quien fue condenado a seis años de prisión por un ataque incendiario en el sur de Chile, había sido extraditado desde Argentina en enero de este año. La Corte Suprema chilena, en su fallo reciente, determinó que Huala ya había cumplido el saldo de su condena, considerando además que había permanecido detenido ilegalmente durante dos meses adicionales.
Tras recuperar su libertad, Jones Huala fue internado en el Hospital Intercultural de Nueva Imperial, en la región de La Araucanía, debido a un delicado estado de salud producto de una huelga de hambre que mantuvo durante 50 días, en la cual perdió alrededor de 20 kilos.
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Sin embargo, su situación migratoria en Chile es irregular. El Ministerio del Interior chileno argumentó que Huala ingresó al país con un permiso temporal, que ahora se encuentra vencido. Por este motivo, se le ha otorgado un plazo de 10 días para abandonar el territorio chileno. Las autoridades también han prohibido su reingreso a Chile durante los próximos 20 años.
Contexto y repercusiones
El caso de Facundo Jones Huala ha sido seguido de cerca tanto en Chile como en Argentina. Su condena se remonta a un ataque incendiario ocurrido en 2013 en el fundo Pisu Pisué de Río Bueno, en la Región de Los Ríos; Chile. Aunque la sentencia original le impuso seis años de prisión, la Corte Suprema reconoció que parte de ese tiempo ya había sido cumplido durante su detención en Argentina, lo que llevó a su liberación.
La orden de expulsión emitida por el gobierno de Boric marca un nuevo capítulo en la compleja relación entre las autoridades chilenas y el movimiento mapuche radical. Si bien la medida cumple con las normativas legales vigentes, la situación médica de Jones Huala podría complicar su salida del país en el plazo estipulado. No obstante, las autoridades chilenas han dejado claro que la orden de expulsión es definitiva y no será reconsiderada.
La expulsión de Jones Huala de Chile, sumada a la prohibición de su reingreso, plantea interrogantes sobre el futuro de su activismo y la relación entre los movimientos indígenas y los gobiernos de la región. Por ahora, Huala debe regresar a Argentina, donde su presencia podría reavivar debates sobre los derechos de los pueblos originarios y el manejo de conflictos territoriales en la Patagonia.