Ulpiano Suarez abrió oficialmente el XXV Congreso de CIDEU, que se desarrollará en la capital mendocina hasta el viernes 7, con la participación de 120 representantes de municipios de Iberoamérica.
El intendente de la Ciudad de Mendoza, también vicepresidente de CIDEU (Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano), fue el encargado de levantar el telón de este importante simposio que comparte y promueve la cultura del pensamiento estratégico urbano entre las ciudades que conforman esta red.
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Ulpiano añadió: “Estamos convencidos del rol protagónico de las ciudades y los gobiernos locales en este desafío que nos presenta el cambio climático. Este congreso representa una gran oportunidad para construir consensos y acuerdos. Iberoamérica tiene mucho para aportar en este contexto”.
Tras el discurso del intendente, tomaron la palabra Luz Amparo Medina, Directora Distrital de Relaciones Internacionales de Bogotá (en representación de la alcaldesa de Bogotá y presidenta de CIDEU, Claudia López); y la secretaria general de CIDEU, Laura Pérez Castaño.
Justamente, Ulpiano Suarez fue el encargado de brindar la primera conferencia denominada “Emergencia climática, desde la Ciudad de Mendoza, una nueva oportunidad para pensar las ciudades”, donde expuso las principales acciones que está llevando adelante la capital mendocina para responder al cambio climático.
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“A través de esta exposición, comparto nuestra estrategia climática, lo que humildemente consideramos un aporte concreto para que otras ciudades del mundo avancen con una guía para la planificación y acción climática”, señaló en el comienzo de su ponencia.
El punto de partida de esta estrategia fue la decisión política. Allá por enero de 2020, la Ciudad de Mendoza fue la primera urbe del continente en declarar la Emergencia Climática, abriendo un camino para el resto.
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En esta nueva agenda todos los sectores debían estar involucrados. Es por eso que se llegó a una nueva Gobernanza Climática, con el objetivo de legitimar la toma de decisiones y de hacer sostenible en el tiempo la acción climática.
Luego se confeccionó el Plan Local de Acción Climática (PLAC) elaborado mediante procesos de gobernanza climática y sobre la base de evidencia de la Ciudad.
Este camino recorrido permitió confirmar el modelo de Ciudad que se planteó a los vecinos allá en el 2019: una Ciudad Sostenible con políticas públicas de triple impacto, promoviendo en un marco de equilibrio y armonía, el desarrollo económico, la inclusión social y el cuidado del ambiente, considerando a la acción climática desde un enfoque transversal a todas las áreas de gobierno.
Desde la gestión municipal se considera estratégico contar con información, con respaldo técnico y científico para el diseño de políticas climáticas. Por eso, la gestión basada en datos es una premisa innegociable. También es necesario la apertura de esos datos para que la ciudadanía pueda hacer el seguimiento y evaluación de la gestión, en una dinámica de rendición de cuentas.
El sistema de gobernanza climática de la ciudad contempla instancias de participación ciudadana permanente, entre las cuales se generan encuestas de percepción y opinión que permiten saber que el 97% de los vecinos de la Ciudad son conscientes de los impactos generados por el cambio climático.
Sabiendo que los recursos que se puedan asignar dentro de un presupuesto municipal siempre serán escasos, la Ciudad de Mendoza desarrolló diferentes estrategias para fortalecer el financiamiento verde.
“Aprovechemos este encuentro no sólo para generar compromisos, sino fundamentalmente para consolidar herramientas que sirvan de guía y hoja de ruta en la gestión climática de las ciudades y también para generar un sistema de monitoreo y seguimiento del nivel de avance de los objetivos comunes asumidos. Es en las ciudades donde se dan las verdaderas luchas para afrontar el cambio climático y es en ellas mismas desde donde tenemos que generar los cambios necesarios”, finalizó Ulpiano Suarez.