Tensa calma. Espera nerviosa por conocer el desenlace de una problemática de larga data. Los traumatólogos nucleados en ACLISA (Asociación de Clínicas y Sanatorios), dispusieron una tregua en medio del conflicto que inició el pasado1 de abril respecto de la atención a los afiliados de PAMI.
Los profesionales dispusieron atender casos que sean de urgencia y emergencias, mientras que no prestarán el servicio para las cirugías programadas. Algo es algo.
Le negociación calmó en algo las turbulentas aguas, ya que el acuerdo es con el 50% de las clínicas y no con todas las que operan en Mendoza.
Las clínicas comunicaron que están absorbiendo los costos y pagando por prestación realizada.
Hay un gran malestar con la obra social OSEP que desde hace rato viene funcionando mal, tanto con los profesionales y ni hablar de la paupérrima atención que le prestan a los afiliados.
El inconveniente es económico y los únicos damnificados son los afiliados de PAMI. Los traumatólogos tampoco están conformes con las clínicas privadas, ya que el pago les llega hasta con una demora de 60 días. Otro punto a tener en cuenta y a mejorar.