Con la presencia del intendente de Rivadavia, Miguel Ángel Ronco; presidente del ISCAMEN, Alejandro Molero; directora de Gestión Social, Liliana Natoli; director de Promoción Económica de Junín, Gustavo Gil, se informó a los productores presentes que han culminado las tres primeras etapas de una campaña de control caracterizada por la extensión y diversidad de herramientas utilizadas.
La actual campaña contra la polilla de la vid se lleva adelante bajo la premisa del manejo integrado y ha incluido la entrega de difusores de feromonas, agroquímicos a productores, alertas de aplicación en momentos oportunos y aeroaplicaciones con productos específicos, cubriendo más de 100 mil hectáreas de vid. Resta la aplicación aérea de feromonas a finales de noviembre.
Entre octubre y noviembre se prestó el Servicio de tratamientos Aéreos con productos específicos en fincas de Lavalle, Luján, Maipú, Rivadavia, Junín, San Martín y Santa Rosa, abarcando 67.600 has en zonas puntuales de los Oasis Norte y Este.
“Hemos concluido con la tercera etapa del operativo lobesia botrana, con la entrega de feromonas, la asistencia con productos en mano y el servicio de aeroaplicaciones con productos de banda de verde. Contentos porque hemos trabajado en forma mancomunada con todos los municipios del este en este operativo de control”, destacó Molero.
Durante el evento se firmó el convenio para que ISCAMEN cuente con una oficina en la Subdirección de Desarrollo Económico donde los productores de Rivadavia podrán tener un mejor acceso a los programas de sanidad vegetal y las distintas herramientas de control del organismo sanitario provincial.
“La lucha contra la lobesia nos ha costado miles de quintales, muchos de los productores no eran conscientes de lo que había que hacer, por eso se tomó esta metodología de hacer un ataque con distintas herramientas como una cuestión de Estado, donde había que interceder para combatir a la polilla de la vid y los resultados están a la vista”, expresó el intendente Miguel Ángel Ronco.