El ministro de Educación de Brasil, Abraham Weintraub, anunció su renuncia al cargo, en medio de una serie de investigaciones judiciales que lo involucran luego de haber dicho en una reunión de gabinete que los 11 miembros de la corte suprema debían ir presos.
Lo hizo a través de un video en el cual aparece al lado del presidente Jair Bolsonaro y en el que anunció que trabajará en un cargo del gobierno brasileño en el Banco Mundial.
Weintraub, uno de los líderes de la extrema derecha brasileña que responde políticamente al gurú de este sector, el astrólogo Olavo de Carvalho, renunció tras 14 meses en el cargo en el que acumuló polémicas en el sector educativo, político, diplomático y judicial.
“Voy a seguir luchando por la libertad y por los valores del presidente Bolsonaro, el mejor presidente de Brasil”, dijo Weintraub, un economista que había sido vicejefe de gabinete en los primeros tres meses.
El último acto de gobierno en Educación de Weintraub fue revocar una resolución del gobierno de Dilma Rousseff, del hoy opositor Partido de los Trabajadores (PT) que asegura cupos y acciones afirmativas (incentivos) en cursos de posgrado en las universidades federales brasileñas a negros, indígenas y discapacitados.
En un video de la reunión de gabinete del 22 de abril que fue revelado por la justicia para invetigar a Bolsonaro por obstrucción de invesigaciones, Weintraubdice que los poderes de Brasilia “son el cáncer del país” y que si fuera por él “encarcelaría a los 11 jueces del Supremo Tribunal Federal”.
Durante la pandemia, Bolsonaro perdió ya cuatro ministros, dos de Salud (Luiz Mandetta y Nelson Teich), uno de Justicia (Sérgio Moro) y Weintraub.
La renuncia del ministro ocurre luego de que el lunes el Supremo Tribunal Federal lo incluyera en una invesgtigación sobre supuesta financiación ilegal y lavado de dinero para montar medios que arquitectan campañas de odio en las redes sociales.
El ministro perdió la mayor parte de las reformas que impulsó en el Congreso e intentó la semana pasada tener autoridad especial en la pandemia para nombrar nuevos rectores, contra los procedimientos de autonomía universitaria.
También Weintraub, un defensor del gobierno estadounidense, causó problemas diplomáticos con China, principal socio comercial de Brasil desde 2009.
Es por eso que responde a acusaciones de racismo, por comentarios que hizo precisamente en las redes sociales y en los que se burló de los chinos y sus dificultades para pronunciar la letra erre, usando la famosa historieta brasileña “A Turma da Mónica”, conocida en la Argentina como “Mónica y sus Amigos”.
Además, insinuó -al igual que el diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente- que la pandemia de Covid-19 sería parte de unos supuestos planes de China para “dominar el mundo”.