Antes de que los fanáticos bolsonaristas tomaran el Palacio del Planalto, y a los edificios del Supremo Tribunal Federal (STF) y del Congreso Nacional, el secretario de Seguridad Pública en ejercicio en ese momento en la capital, Fernando de Sousa Oliveira, le envió un audio al gobernador -ahora removido- Ibaneis Rocha donde afirma que estaba “todo tranquilo” y que la manifestación era “totalmente pacífica”.
Según informó Folha de S.Paulo, en esa grabación el funcionario también admite que su secretaría negoció con las personas que estaban realizando el acampe enfrente del cuartel general del Ejército de Brasilia para que fuesen hasta la Explanada de los Ministerios de forma “pacífica y organizada”, como así también que habían aceptado que la Policía los acompañara desde el campamento hasta la Plaza de los Tres Poderes, en un tramo de aproximadamente ocho kilómetros.
En tanto, el secretario también le dice a Rocha que había 150 ómnibus en el Distrito Federal, que estaban monitoreados por organismos de inteligencia, y que no había “ningún informe de alguna cuestión agresiva”, todo según datos a los que accedió ese reconocido medio brasileño.
“Gobernador, le voy a pasar el último informe, del mediodía. Todo tranquilo. Los manifestantes están descendiendo desde el sector militar, controlados, escoltados por la Policía. Tuvimos una negociación para que ellos descendieran de forma pacífica, organizada, acompañada. Lo hicieron. Están en un clima bien tranquilo, bien ameno. Una manifestación tranquila, totalmente pacífica. Hasta ahora. Nuestra inteligencia está monitoreando y no hay ningún informe de alguna cuestión agresiva o ligada a ese tipo de comportamientos”, decía Oliveira a Rocha.
Oliveira tenía el control de la Secretaría de Seguridad porque el titular, Anderson Torres, ahora cesado de su cargo, se encontraba de vacaciones en Estados Unidos. Por su parte, Rocha también fue apartado por orden del juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes.