El futuro del mítico estadio Luna Park genera polémica y alarma. Las organizaciones Basta de Demoler y Fundación Ciudad denunciaron un proyecto de demolición que amenaza al recinto, declarado Monumento Histórico Nacional desde 2007. A través de cartas dirigidas al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y a la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos, presidida por Mónica Capano, exigieron que se frene cualquier intervención que vulnere su estatus patrimonial.
Sin respuestas de las autoridades
Las cartas, enviadas el 25 de noviembre y el 3 de diciembre, respectivamente, aún no recibieron respuesta formal. Firmadas por Ana Bas, presidenta de Basta de Demoler, y Andreína de Luca de Caraballo, titular de Fundación Ciudad, ambas misivas remarcan la ilegalidad de la demolición al estar el estadio protegido por el Decreto N° 123/2007.
“Solicitamos que se adopten medidas para garantizar el cumplimiento de la legislación vigente, incluyendo las competencias compartidas con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, según la Ley N° 12.665”, expresaron. Además, pidieron a la Comisión Nacional que confirme si Luna Park Stadium S.A., la sociedad propietaria del predio, solicitó autorización para alguna intervención.
Protección en riesgo
El estadio, ícono de la cultura porteña y escenario de eventos históricos, no puede ser intervenido sin el aval de organismos estatales. Ambas organizaciones demandaron al Gobierno de la Ciudad información sobre las medidas que planea adoptar para resguardar el inmueble y su carácter patrimonial.
“El Luna Park es un símbolo, y permitir su demolición sería una pérdida irreparable para el patrimonio de los argentinos”, advirtieron las ONG.
Un emblema en el ojo de la tormenta
Desde su declaración como Monumento Histórico Nacional, el Luna Park ha sido objeto de disputas por su administración y uso. Ahora, el posible proyecto de demolición reaviva las tensiones sobre el cuidado del patrimonio arquitectónico y cultural de Buenos Aires.
Mientras tanto, las organizaciones esperan una respuesta oficial que garantice la preservación del estadio, cuya historia forma parte del alma de la ciudad.