Por primera vez en más de un año, las exportaciones vitivinícolas tuvieron un crecimiento interanual en abril. Según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura, las ventas al exterior de vino crecieron un 32,1%, con una suba del 28,4% en los tintos y del 56,6% en los blancos. En el acumulado del año, la disminución es del 2,2%, lo que marca una desaceleración de la caída, que en el primer trimestre llegaba al 12,2%.
Las ventas al exterior de vino fraccionado tuvieron un incremento, con respecto a abril de 2023, de 35,8% (38,3% para el tinto y 22% para el blanco), mientras que las de granel crecieron un 21,8%, con una marcada suba de los blancos (+266,4%) y una mínima de los tintos (2,8%). Y el mosto siguió teniendo buenos datos de evolución, con un 74,8% de aumento, aunque la comparación sea con un año de cosecha muy baja.
Si bien en abril del año pasado la caída interanual de las exportaciones totales de vino había sido del 39,9%, con los números del mes pasado se rompe una tendencia de más de un año de valores interanuales negativos. Por otra parte, hubo otros meses, como febrero de 2024, en los que se mantuvo la retracción (del 5,1%), pese a que la comparación se establecía con un febrero de 2023, en el que la disminución interanual alcanzó el 33%.
El presidente de Bodegas de Argentina, Walter Bressia, comentó que estaban esperando que la situación se empezara a acomodar después del primer trimestre. Esto, porque los distribuidores de vino de Estados Unidos habían acumulado un stock muy fuerte antes de la pandemia y recién lo están agotando, por lo que han vuelto a demandar producto.
Pero indicó que la recuperación está ligada también al tipo de cambio, que hoy les permite ser más competitivos porque se pueden ajustar mejor a los precios internacionales en lugar de quedar fuera de mercado, como venía sucediendo, en especial con los vinos de entrada de gama. También contribuye el freno de la inflación, ya que, si bien el ritmo de devaluación actual es bajo, los costos están tendiendo a mantenerse.
Bressia añadió que a partir de mediados de año también se producirá un repunte del mercado interno y que ya empiezan a notarse los primeros indicios. Resaltó que esto genera entusiasmo y estimula para seguir trabajando.
Con el importante repunte en abril, el acumulado de exportaciones en el primer cuatrimestre llegó a una disminución del 2,2%, cuando el del primer trimestre fue del 12,2%. El vino fraccionado mantuvo una retracción, con respecto a las ventas en el mercado externo de enero a abril de 2023, del 4,2%. En cambio, el granel tuvo un crecimiento, en el mismo periodo, de 4,2%.
El INV detalla que el precio promedio del vino total en el acumulado enero-abril es de 3,35 dólares/litro (-1,4%), llegando el fraccionado a 4,14 dólares/litro (-0,2%) y el granel a 1,01 dólares/litro (+3,3%). Y suma que ha aumentado el precio medio de los vinos varietales y espumosos.
Las exportaciones de mosto concentrado en lo que va del año han tenido un incremento del 94% en volumen y del 75% en ingreso de divisas respecto al mismo período del año anterior. El precio promedio del producto en el acumulado llega a 1.643,7 dólares/tonelada y en abril se comercializó a un precio promedio de 1.623,7 dólares por tonelada.