Bodega Trapiche elabora aproximadamente 10.000.000 litros de Malbec, los cuales cubren las etiquetas de las líneas Trapiche Reserva, Fond De Cave, Tesoro, Expedición Sur, Medalla, Gran Medalla, Terroir Series, Iscay y Manos.
Sin dudas, el de mayor volumen es el Trapiche Reserva, pero "tenemos un Malbec en cada una de nuestras líneas, podríamos decir unos 14 Malbecs diferentes", comenta Sergio Casé, enólogo principal de la bodega.
Este 17 de abril, se festeja el día mundial del Malbec y una de las grandes bodegas representantes del varietal, tanto en la Argentina como en el mundo, es Bodega Trapiche. A saber, por el volumen que produce y además por la calidad de cada una de sus líneas. Sus etiquetas están alrededor del globo y son multipremiadas.
Sin embargo, para llegar a estos estándares de calidad, la evolución en la elaboración de Malbec ha sido todo un desafío. "La técnica principal es la elaboración clásica donde las levaduras, temperaturas, maceraciones, remontajes y sobre todo la sensibilidad organoléptica del enólogo marcan el carácter de cada uno de nuestros Malbecs", describe Casé.
Y esa sensibilidad es notable, porque puede tener diferentes perfiles. "Es una variedad muy plástica, con ventanas de maduración más amplias, si la comparamos con los Cabernet Sauvignon por ejemplo. Es una variedad que hay que saber esperar y definir el punto justo de madurez, que expresa la personalidad de cada uno de los terruños", explica el enólogo.
Por lo cual establecer mejores o peores sitios para producir Malbec puede ser un error. "No hay mejores ni peores, cada suelo con sus características nos da Malbec únicos y distintos, esto es lo divertido del varietal", concluye el profesional.
Teniendo en cuenta la historia de los últimos 30 años, el Malbec pasó de mezclar zonas a tener varias IG las cuales muestran su personalidad. De Malbec concentrados y muy maduros a vinos más elegantes con distintas texturas. Del uso de barricas nuevas tradicionales de 225 L a barriles de mayor capacidad y con tostados más precisos para complejizar y aportar más capas de elegancia.
Sergio Casé, además es un gran cocinero y aficionado a la gastronomía y se anima a maridar este varietal tan emblemático. "Es muy versátil, desde un Malbec sencillo, fresco afrutado para unos ricostallarines o una pizza hasta lo gourmet de este mundo". El enólogo tiene una predilección por el Malbec Terroir Series Coletto, porque es "el corazón de todo lo que hacemos".
Y con ello agrega: "El mayor aprendizaje de haber producido Malbec es el conocer la cultura de más de 90 países en donde vendemos nuestros vinos, gente con costumbres parecidas a nosotros y otros totalmente distintas, con comidas, sabores y situaciones de consumos en donde el Malbec siempre es protagonista.
El Malbec con su estirpe, comunica su personalidad ante el resto de los varietales, al igual que como lo hace con la diversidad de personas de este mundo.