Bodegas de Argentina le pidió al Gobierno nacional que suspenda la alícuota de 4,5% de derechos a la exportación que, actualmente, gravan las exportaciones para los vinos embotellados.
Desde el sector vitivinícola señalaron que con el actual contexto macroeconómico y los resultados de las exportaciones de vino en botella, “se hace imperiosa la necesidad de suspender temporalmente los derechos de exportación, con la finalidad de liberar recursos de las bodegas para reinvertir en el negocio y sostener así, la demanda en el exterior”.
También pidieron flexibilizar las medidas de acceso al al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) para cumplir con los compromisos con los clientes y proveedores del exterior. Desde Bodegas de Argentinas señalaron que, sólo en el primer semestre del 2022, las exportaciones de vino embotellado cayeron un 6% respecto al mismo período del año pasado.
“En términos de valor, el guarismo para el año en curso fue de 387,1 millones de dólares contra 391,4 millones en el primer semestre del año pasado”, indicaron teniendo en cuenta los del Instituto Nacional de Vitivinicultura.
Las cifras contrastan con los buenos datos que venían trayendo las exportaciones en los últimos años, al punto tal que en 2021 habían crecido un 9,3% en la etapa pospandemia, aunque en este apartado los envíos al exterior "no logran desde 2010 superar sostenidamente los 200-220 millones de litros / año y los 800 millones de dólares /año en valor".
“Venimos de un período extenso de atraso cambiario sostenido, y por distintos factores tenemos inflación de costos que superan con creces la inflación local”, ampliaron. Así, dan cuenta que las botellas tuvieron un incremento en los precios superior al 60% en lo que val del año y la uva, más de 80% en relación al año anterior, sostuvo Patricia Ortiz, Presidente de Bodegas de Argentina.
“Cuando el tipo de cambio comienza a correr muy por detrás de la inflación de costos los márgenes de exportación se reducen dramáticamente. Nosotros no podemos trasladar la inflación a los precios en el exterior. Simplemente nos dejan de comprar si quedamos desfasados de precio en comparación con proveedores de otros países. Acá estamos hablando que por mucho menos de un dólar se te cae un cliente”, agregó el vicepresidente de la entidad, Francisco do Pico.
“A la problemática de las retenciones debemos sumar el efecto negativo de las recientes medidas que dificultan el acceso al MULC para la importación de insumos y el pago de servicios en el exterior, que son esenciales para nuestras exportaciones", completó Ramiro Barrios, Director de Comercio Exterior de la cámara.