Tras la anticipación dicha por el Ministro de Economía, Luis Caputo, el próximo lunes 2 de septiembre se hará efectiva una reducción de 10 puntos en el impuesto PAIS (el impuesto creado para recaudar más y controlar la salida de divisas del país). Esta baja afectará tanto a los autos 0km como a las partes e insumos importados utilizados en la fabricación de vehículos.
En una entrevista realizada en el programa "Tenés que Saberlo" de Radio Jornada (FM 91.9), Carlos Martín, propietario de Automotores General San Martín y representante de ACARA en Mendoza, explicó a la mesa radial cómo la reducción próxima a realizarse, podría afectar los precios de los autos 0km en Argentina.
La cara principal de ACARA, expresó que aunque la disminución del 10% en la alícuota del impuesto es una medida positiva, su impacto real en los precios de los vehículos no será tan significativo como algunos esperan, señalando que un 70% de las autopartes de los vehículos nacionales son importadas y que, además, la devaluación mensual del 2% anunciada por el gobierno también influirá.
El empresario también destacó que, aunque los precios de los autos han permanecido estables desde marzo, el efecto de la reducción del impuesto se verá reflejado únicamente en los vehículos que lleguen al país a partir de septiembre, explicando que las terminales automotrices suelen actualizar sus listas de precios a fin de mes o principios del mes siguiente.
A pesar de la incertidumbre económica, el mercado automotriz ha mostrado un desempeño mejor de lo esperado, con proyecciones que indican que se podrían vender hasta 380,000 autos nuevos en el año. "Gracias a Dios, se están vendiendo autos", comentó Martín, atribuyendo este resultado a las agresivas ofertas de financiación y las tasas subsidiadas que han incentivado la compra de vehículo, concluyendo así su palabra en el aire de Radio Jornada.
¿Cómo se llevará cabo la baja del impuesto PAIS?
Anteriormente, este arancel había sido incrementado al 17,5% por el gobierno de Milei, pero ahora se regresará al 7,5%, lo que debería reducir los costos para los fabricantes e importadores. Sin embargo, esta disminución en la carga impositiva se enfrenta a otros factores como la inflación y el crawling peg (término utilizado para devaluación administrada) del 2% mensual, lo que significa que aunque los costos bajen, por un lado, no implica que podrían aumentar por otro.
En conclusión, aunque la industria automotriz en su conjunto se beneficiará de esta medida, el impacto final en los precios de los vehículos dependerá de cómo estos factores se equilibren en el mercado. A partir del lunes, se espera que las concesionarias comiencen a recibir las nuevas listas de precios, que reflejarán estos cambios impositivos y otros ajustes económicos recientes.