Desde el 1° de enero de 2025, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) implementó una actualización en los montos mínimos que las entidades financieras, billeteras virtuales y plataformas digitales deben reportar sobre las operaciones de sus clientes. Este ajuste se realiza en el marco del régimen de información vigente y responde a la variación semestral del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC.
La medida tiene como objetivo fortalecer el control fiscal y garantizar la transparencia en las transacciones financieras, manteniendo el compromiso de no generar impactos en los consumidores.
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Los nuevos límites establecidos
A partir de esta actualización, las operaciones que deben ser informadas solo aplican si los montos superan los siguientes valores:
1. $600.000
- Total de consumos realizados con tarjetas de débito dentro del país.
- Ingresos o egresos totales en billeteras virtuales.
2. $1.000.000
- Acreditaciones bancarias acumuladas en el mes.
- Depósitos a plazo fijo constituidos durante el mes.
- Extracciones de efectivo realizadas por cualquier medio, tanto en el país como en el exterior.
- Saldo final en cuentas bancarias y billeteras virtuales al último día hábil de cada mes.
3. $2.000.000
- Exclusivo para billeteras virtuales: transferencias bancarias o virtuales superiores a este monto.
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Un régimen que no afecta al consumidor
Es importante destacar que esta normativa no supone cambios ni cargas adicionales para los clientes de bancos o billeteras digitales. El régimen de información es responsabilidad exclusiva de las entidades financieras y plataformas, que deben remitir los datos requeridos a ARCA.
Propósitos de la medida
La actualización de los montos mínimos responde a la necesidad de adaptar los controles a las fluctuaciones económicas del país, buscando mantener la efectividad en el monitoreo de operaciones relevantes sin interferir en las actividades cotidianas de los usuarios.
Desde ARCA, se recalca que estas medidas buscan optimizar la recaudación fiscal y promover la transparencia financiera en un entorno de crecimiento de las transacciones digitales y bancarias.
Este ajuste semestral se suma a otros esfuerzos por parte del organismo para modernizar la gestión tributaria, en línea con las tendencias económicas y tecnológicas actuales.