Independiente Rivadavia se encuentra a horas de disputar uno de los encuentros más importantes en su vida deportiva. La final ante Almirante Brown, le puede permitir al Azul del Parque, llegar a la máxima categoría del fútbol Argentino.
El sentimiento de todo el pueblo leproso tiene un solo objetivo: ganar y tocar el cielo con las manos. Sin embargo, es importante conocer cómo son las emociones de los jugadores, los protagonistas directos de esta historia, en las horas previas al trascendental choque.
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Para ello, el licenciado en Psicología deportiva, Gustavo Ferrari, explica el camino que debería tomar el plantel de Independiente Rivadavia para llegar a buen puerto y festejar a lo grande.
¿Qué momento que está viviendo el mundo Independiente Rivadavia? comienza preguntándose el profesional. Y agrega: "La motivación de los jugadores está. La motivación del cuerpo técnico extrínseca está pero, por sobre todas las cosas, la Lepra está a un paso de alcanzar la gloria, de coronar el trabajo de un año muy largo, con mucho sacrificio. Lo importante es el momento de la activación. Hay que tener en cuenta que en algunas situaciones, las emociones pueden jugar en contra respecto a la búsqueda del objetivo final. Si la motivación es excesiva, la activación se pasa de la raya. Es contraproducente perder el punto de equilibrio porque deja de ser ideal y pueden darse casos que el jugador pueda sufrir lesiones, tensiones y puede quedar preso de sus mismo nervios" comentó
A la hora de transitar las horas previas al trascendental partido, Ferrari explicó:"Es muy importante lograr una cercanía, una especie de acompañamiento entre todo el grupo. En muchos casos, los jugadores pasan más tiempo con los profes, sin embargo, el cuerpo técnico en este caso debe tener una cercanía más directa con los jugadores preguntándoles cómo se sienten, si quieren hablar sobre algún que otro tema. Es importante que los protagonistas pueden expresar sus emociones. El grupo debe hablar del presente deportivo y hasta dónde se ha llegado gracias a todo el esfuerzo que cada uno desde su función sumó para el bien común"
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Si bien es una una final, quizás el partido más importante del año para Independiente Rivadavia, el psicólogo sugirió que los protagonistas deben tomar el partido como un trámite más. Que la energía, la motivación y el aliento de la gente sea de la gente y que el equipo logre una abstracción real del contexto porque de lo contrario, puede llegar a ser contraproducente en la actuación de algunos y transitar una especie de bloqueo emocional que no lo lleve a despempeñar una buena performance dentro del campo de juego. El jugador trata de cumplir el sueño de la gente y por supuesto, el suyo pero el desafío se hace muy grande y en algunos casos, pueden aparecer errores que los alejaría de cumplir con el objetivo deseado" agregó
"En una instancia decisiva como va a jugar Independiente Rivadavia es muy positivo valorar el trabajo y el esfuerzo de todos; de los que están y de los que no están. Si bien Reali, no va a poder ser parte del once debido a la expulsión en el partido con Maipú y se pierde la final, es importante el apoyo emocional que pueda brindarle a sus compañeros"
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"Si bien es una situación especial por todo lo que significa, se le tiene que ayudar a comprender tanto al cuerpo técnico como a los jugadores que es una situación más. Una situación distinta a la que se viene jugando, y hay que atravesarla y que es fundamental que pasen los minutos con el objetivo de mantener la conciencia tranquila y por sobre todas las cosas, enfocada dentro de lo que se está jugando pero sin magnificar todo lo que se está jugando afuera o la presión de la gente" concluyo.
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